De la contaminación siderúrgica al combustible sostenible para buques
Si pudiéramos convertir los residuos siderúrgicos en un combustible sostenible para el transporte marítimo, podríamos reducir considerablemente las emisiones, que es exactamente lo que ha hecho el equipo del proyecto FReSMe. La innovación del proyecto empieza por capturar el CO2 que se emite en una acería. A continuación, mediante un proceso de producción de metanol a partir de emisiones, este carbono capturado se recicla en un combustible de metanol producido de forma sostenible que puede utilizarse para propulsar buques, incluido un carguero que actualmente trabaja entre Suecia y Alemania.
Palabras clave
FReSMe, transporte marítimo y fluvial, CINEA, sostenibilidad, financiado con fondos europeos, investigación, transporte marítimo, transporte, navegación interior, puerto, combustible alternativo, viento, metanol