Un polímero reciclado se abre camino en el vidrio laminado
El polivinilbutiral (PVB) es un material plástico muy utilizado —muy común en los parabrisas de los coches y las ventanas de los edificios— que hace que el vidrio laminado sea seguro e inastillable. Sin embargo, el reciclado del PVB plantea importantes retos, lo que lleva a su frecuente clasificación como residuo. Un problema importante es la presencia de trozos de vidrio sobrantes en el PVB reciclado, lo que da lugar a un producto turbio y menos claro. Además, la exposición a la intemperie a lo largo del tiempo permite que el vidrio laminado se separe más fácilmente del PVB, pero este proceso puede degradar el PVB y complicar su reutilización. Las variaciones en las composiciones del PVB de con diferentes orígenes también pueden agravar el problema de la turbidez cuando se mezclan. Debido a estas dificultades, solo se recicla una pequeña fracción del PVB, y la mayoría de los recicladores se centran en recuperar el vidrio y dejar el PVB como subproducto de uso limitado. El equipo del proyecto SUNRISE, financiado con fondos europeos, pretendía resolver este problema mediante el desarrollo de un sistema avanzado de clasificación diseñado para separar y purificar el PVB, lo que permitiría reciclar más de 125 000 toneladas. Este sistema innovador promete importantes beneficios económicos, ambientales y sociales al reducir los residuos y crear nuevas aplicaciones para el PVB reciclado de alta calidad.
Tecnología innovadora para la recuperación del vidrio y la reutilización del PVB
«Hemos desarrollado una herramienta con varios sensores de última generación que permite clasificar los residuos de vidrio laminado en función de la composición y el estado del PVB de su interior», señala Angélica Pérez Manso, coordinadora del proyecto. «Esta herramienta utiliza sensores ópticos avanzados y algoritmos inteligentes para evaluar con rapidez y precisión la composición del PVB. Con esta tecnología, podemos clasificar cien piezas de vidrio laminado por hora, asegurándonos de que cada pieza se clasifica correctamente». En España, se está llevando a cabo una demostración piloto de la herramienta prototipo. Una vez clasificado, el vidrio se trata en una instalación especializada que puede reciclar hasta 360 kilogramos de PVB por hora. El proceso de reciclaje implica una mezcla de métodos mecánicos y químicos. Dependiendo del tipo de residuo (automóvil o construcción), ayudan a separar el vidrio del PVB de forma eficaz. La etapa mecánica consiste en romper el vidrio laminado en trozos más pequeños para separar el vidrio de la capa de PVB. A continuación, se aplica un lavado químico especial para ayudar a debilitar las uniones entre los fragmentos de vidrio y el PVB. Esto facilita la retirada del vidrio, lo que garantiza que el PVB esté limpio y listo para su reciclaje. El equipo también ha estudiado la posibilidad de añadir antioxidantes para inhibir la degradación térmica del PVB durante el reprocesado, lo que garantiza su estabilidad.
Creación de nuevo vidrio laminado, reducción de residuos y establecimiento de normas de reciclaje
«La aplicación más prometedora a la que nos dirigimos es la creación de nuevas películas intercalares para vidrio laminado. Pero no nos conformamos con el vidrio, sino que estamos explorando otras aplicaciones del PVB reciclado, como la creación de revestimientos, tejidos e incluso componentes para dispositivos de almacenamiento de energía, como baterías», afirma Pérez Manso. Las actividades del equipo de SUNRISE están transformando el reciclaje del PVB, lo que convierte este costoso material en nuevo vidrio laminado y, a su vez, favorece una economía circular. Al reutilizar el PVB, en el proyecto se reducen considerablemente los residuos plásticos en la Unión Europea y se aumentan las tasas de reciclaje de los fabricantes de vidrio. Esta tecnología innovadora no solo añade valor a los procesos de reciclaje existentes, sino que también allana el camino para nuevos productos y mercados. Además, en SUNRISE se fomentan las normas del sector mediante un acuerdo de trabajo del Comité Europeo de Normalización para garantizar la calidad del PVB reciclado.
Palabras clave
SUNRISE, PVB, vidrio laminado, reciclaje, clasificación, residuos, economía circular