Un nuevo modelo de deshielo revela que hay que actuar con celeridad
El deshielo de las capas de hielo y de los glaciares de montaña contribuye al aumento del nivel del mar. Si la capa de hielo de la Antártida, que contiene el 90 % de todo el hielo del planeta, se derritiera, arrasaría todas las ciudades costeras del mundo. Incluso un pequeño aumento del nivel del mar tendrá, con toda probabilidad, consecuencias nefastas para las regiones costeras. Si bien los científicos coinciden en que es casi seguro que el aumento del nivel del mar continuará, aún no está claro del todo el momento exacto y el ritmo de esta transformación. Por un lado, ello se debe a las dificultades para modelizar la pérdida de hielo en las regiones polares y, por otro, a que cualquier aumento depende de la eficacia (o no) con la que se reduzcan las emisiones.
Conocimientos especializados sobre la criosfera y las zonas costeras
En PROTECT se pretendía mejorar las proyecciones del deshielo de las capas de hielo de Groenlandia, la Antártida y de los glaciares de todo el mundo, así como la evolución del aumento del nivel del mar en todo el mundo. Uno de los objetivos principales del equipo del proyecto era ampliar la escala temporal de estas proyecciones, es decir, de lo que podría ocurrir en el próximo decenio a los próximos siglos. «El aumento del nivel del mar no repercute de la misma manera en todas partes —explica el coordinador del proyecto PROTECT, Gael Durand, del Centro Nacional de Investigación Científica de Francia—. Así que también nos propusimos estudiar el aumento del nivel del mar tanto a escala mundial como local». Para ello, el proyecto reunió a dos comunidades científicas clave: expertos en la criosfera como Durand, especializado en la modelización de capas de hielo, e investigadores que estudian el efecto del nivel del mar en las zonas costeras. También se basó en ICE2SEA, un proyecto previo financiado con fondos europeos, en el que se corroboró que el deshielo de las capas de hielo constituye una de las principales fuentes del actual aumento del nivel del mar.
Cuantificación del efecto del cambio climático
Se emplearon observaciones de teledetección para evaluar y mejorar los modelos empleados en las proyecciones de las capas de hielo y los glaciares, así como datos climáticos extraídos del Programa de Observación de la Tierra de la Agencia Espacial Europea. Ello posibilitó al equipo comprender mejor las variabilidades a corto plazo y hacer proyecciones más precisas hasta 2050. Esa es la escala temporal más importante para muchas decisiones de gestión costera. En el proyecto se quiso contar con la participación de diversas partes interesadas del ámbito costero a fin de conocer mejor sus necesidades de información. «Si eres un agricultor o diriges una central nuclear, tu enfoque del riesgo de aumento del nivel del mar no será el mismo», comenta Durand. El equipo del proyecto también intentó proyectar el aumento del nivel del mar como consecuencia del deshielo de las capas de hielo y los glaciares hasta el año 2100, y más allá, la escala temporal que el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (GIECC) considera pertinente para la planificación de infraestructuras a largo plazo. Hasta ahora se han publicado más de ochenta artículos, y el equipo del proyecto ha subido a su página web un juego de escape educativo sobre cómo salvar a los glaciares.
Acción climática inmediata
En el proyecto, que se prolongará hasta finales de febrero de 2025, se seguirán elaborando nuevas proyecciones del posible aumento del nivel del mar hasta 2150 y más allá. Además de recalcar la necesidad de reducir de forma inmediata las emisiones de gases de efecto invernadero, Durand señala que serán necesarios nuevos servicios climáticos para fomentar una adaptación al cambio climático eficaz. «Hasta el momento, nuestros hallazgos también han consolidado el mensaje de que la mitigación del cambio climático no es opcional; esta nos dará más tiempo y más opciones para la adaptación», agrega Durand. «No podemos proteger toda la costa. Tenemos que tomar medidas urgentes ya, y seguir el Acuerdo de París es la mejor opción que tenemos ante nosotros. Lo que ocurra en la Antártida, en términos de deshielo, no afectará solo a la Antártida».
Palabras clave
PROTECT, clima, Groenlandia, polar, criosfera, GIECC