El inmenso esfuerzo colectivo para rastrear los cambios por todo el Ártico
El mundo prestó atención cuando este verano llovió en la helada cumbre de Groenlandia por primera vez desde que comenzaron los registros en 1950. En la actualidad, al ser las «novedades» climáticas un fenómeno frecuente, los datos que nos permiten rastrear y analizar dichos cambios se están convirtiendo en un recurso esencial para la humanidad. Esto es particularmente importante en el Ártico, donde la crisis climática ya está desencadenando cambios profundos con repercusiones mundiales como el aumento del nivel del mar y cambios en los patrones climáticos. A fin de colmar la brecha y aprovechar mejor los datos disponibles, el proyecto financiado con fondos europeos INTAROS (Integrated Arctic observation system) trabaja con el objetivo de desarrollar un sistema integrado de observación del Ártico para la ciencia terrestre, oceánica y atmosférica. Su investigación se centra en la observación local, la cual complementa la supervisión satelital del medio ambiente al proporcionar las pruebas empíricas y físicas necesarias para comprobar, ajustar e interpretar los datos obtenidos por teledetección. Stein Sandven, coordinador del proyecto, explica: «La disminución del hielo marino en el Ártico se ha estado documentado durante más de cuarenta años mediante observación satelital. Al ofrecer mediciones "in situ" de aspectos como la temperatura, la salinidad y el grosor, ayudamos a crear mejores algoritmos y contribuimos a la realización de predicciones más fiables sobre la disminución futura».
Datos para la vida diaria
Su equipo del Centro Nansen de Teledetección y Detección Ambiental (NERSC, por sus siglas en inglés), trabajó con diversos socios para crear un inventario de los datos y sistemas de observación actuales. Se incluyeron proyectos de todo el mundo y también de comunidades locales en el Ártico que supervisan los recursos naturales que necesitan para subsistir. «Por ejemplo, en Groenlandia, los pescadores registran la información sobre las capturas en una base de datos. A continuación, los datos acerca del incremento o la disminución de las poblaciones de peces se comparten con el gobierno local para determinar las cuotas pesqueras», afirma Sandven. Se trata de un proceso bidireccional: mientras la información recopilada por las comunidades locales se introduce en el nuevo sistema integrado, el proyecto también pone a su disposición datos adicionales.
Atar más cabos
Uno de los principales logros de INTAROS es el desarrollo de nuevas soluciones que colman lagunas importantes en los sistemas de observación actuales. Se desplegó una red de boyas flotantes por el Ártico central a fin de recopilar datos sobre el hielo marino, como la temperatura, la presión del aire y el grosor, los cuales a continuación se transmiten por satélite. El equipo utiliza amarras ancladas en el fondo para recopilar datos geoquímicos, biológicos, acústicos y oceanográficos bajo el hielo marino. Puesto que los datos no se pueden transmitir por debajo del mar, se recogen las amarras tras uno o dos años de actividad. Otros ejemplos son los instrumentos automatizados que se instalan en los buques que viajan por el Ártico y las estaciones automatizadas que recopilan datos de la criosfera y la atmósfera en la capa de hielo de Groenlandia. «Es importante desplegar más instrumentos en el Ártico: solo la capa de hielo de Groenlandia abarca una superficie de más de 1,7 millones de kilómetros cuadrados», indica Sandven. «Se requiere una determinada red de estaciones para recopilar los datos necesarios».
Acceso en línea
Todos los datos recopilados están disponibles de forma gratuita para diversos usos en el portal web iAOS del proyecto. El público objetivo incluye comunidades locales, organismos nacionales, investigadores climáticos y científicos de datos. En la actualidad, el programa europeo de observación de la Tierra Copernicus se enfrenta una importante escasez de datos «in situ» en el Ártico. Aumentar la cantidad de datos disponibles mediante INTAROS, garantizando que se distribuye de forma regular en formatos estándar, convertirá a la base de datos del proyecto en un recurso esencial para una serie de servicios de Copernicus.
Palabras clave
INTAROS, Ártico, cambio climático, «in situ», observación de la Tierra, teledetección, datos, Groenlandia, hielo marino