Cómo los retornados están revitalizando las zonas rurales de Portugal
La tasa de emigración de Portugal es una de las más elevadas de la Unión Europea, puesto que uno de cada cinco portugueses vive en el extranjero. Aunque este descenso demográfico ha dejado su huella en las zonas rurales de Portugal, está en marcha un movimiento opuesto: el regreso de los emigrantes a los pueblos y zonas remotas. ¿Cómo se pueden aprovechar mejor las contribuciones de aquellos que regresan o desean regresar? El proyecto MigRural, financiado con fondos europeos, ha proporcionado nuevos instrumentos para ayudar a los retornados con vistas a reforzar el tejido social local y apoyar la economía. El proyecto, realizado con el respaldo de las Acciones Marie Skłodowska-Curie (MSCA), estudió los efectos en el ámbito familiar, de pueblo y regional para comprender mejor esta dinámica. «La emigración todavía tiene un papel importante en la vida familiar. Existen muchas trayectorias diferentes, pero el movimiento entre varios países es la norma general», comenta Amandine Desille, beneficiaria de una beca de investigación MSCA en el Instituto de Geografía y Ordenación Territorial de la Universidad de Lisboa y coordinadora del proyecto MigRural. Desille, cuya investigación se centra en la región Trás-os-Montes, cerca de la frontera con España, recopiló el testimonio de veintiuna familias locales diferentes.
Participantes activos
Una de las observaciones más sorprendentes es que no solo los jubilados regresan a los pueblos. Desille lo explica: «Aunque los jubilados son la mayoría, también hay gente más joven que regresa, a menudo, a crear su propio negocio. Por ejemplo, he conocido retornados que abrieron un restaurante, un mercado para agricultores, una empresa de taxis o alojamientos rurales». Otro hallazgo importante es que los jubilados también son participantes activos. Según señala Desille: «Se dedican a la agricultura, reforman sus casas, gestionan alquileres y participan de forma activa en los comités locales». Durante la temporada de vacaciones, las visitas de familiares otorgan un impulso adicional a la vida y economía locales, lo que se nota más allá del pueblo y en toda la región.
Apoyo específico
Desille apunta que, aunque el apoyo público a los retornados existe, este no siempre satisface las necesidades de los posibles retornados. El Programa Regressar, un plan a gran escala del Gobierno puesto en marcha en 2019 para apoyar económicamente a los retornados, solo se abrió en enero de 2021 para aquellos que desean emprender o invertir en un negocio local. También existe una brecha en la comunicación, sobre todo en lo referente al acercamiento a los retornados en edad de jubilación. Aunque se ha creado una red de oficinas de asistencia (llamadas GAE), existe muy poca información acerca de la disponibilidad de dichos servicios a escala local. Desille afirma que el apoyo específico es fundamental: «Podemos hacer muchas cosas para facilitar los regresos, especialmente para las personas jóvenes y para aquellos que desean invertir y participar en la economía local».
Una nueva narrativa
Desille ha observado una serie de tendencias que han contribuido al surgimiento de una narrativa regional nueva. Los diferentes desarrollos de infraestructuras de transporte en esta región fronteriza han creado una nueva sensación de apertura y de oportunidad con perspectiva europea. Esta perspectiva se refleja en la forma en la que la historia de emigración de la región se aborda hoy en día, tal y como explica Desille: «En la actualidad, una nueva narrativa de aventura, libertad y coraje define la emigración clandestina que tuvo lugar durante la dictadura (1933-1974)». En el futuro, Desille espera seguir investigando los vínculos entre el legado migrante, la diversidad y el efecto en las comunidades locales en su próximo proyecto de investigación.
Palabras clave
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