Limitar la contaminación fúngica en alimentos
El trigo, el maíz, el vino, la vid y los frutos secos son productos alimentarios de gran importancia para el consumo humano y animal que pueden estar contaminados por micotoxinas. Las micotoxinas, producidas por el crecimiento de hongos en las plantas o en los alimentos recolectados, pueden causar un amplio rango de problemas de salud en los seres humanos y grandes pérdidas en la productividad de los cultivos. Los investigadores del proyecto financiado por la Unión Europea «Novel integrated strategies for worldwide mycotoxin reduction in the food and feed chains» (MYCORED) se propusieron mejorar la seguridad y la calidad alimentaria por medio del desarrollo de nuevos métodos para detectar y eliminar micotoxinas. Para tal fin, se examinaron tanto variedades de plantas resistentes a hongos como diferentes métodos de detección de contaminación por micotoxinas y novedosos fungicidas. Los investigadores del proyecto MYCORED identificaron nuevas variedades de cultivo resistentes a enfermedades fúngicas como la fusariosis de la espiga de trigo. Tanto la mejora del empleo de fungicidas como un programa de modelización y de apoyo a la toma de decisiones ayudaron a reducir la contaminación de los alimentos antes de ser recolectados. Los científicos recogieron toda la información disponible para diseñar modelos que permitan detectar la enfermedad en los cultivos de trigo, maíz y la vid. La modelización de la contaminación por micotoxinas en variedades de trigo, maíz y avellanas inoculadas con hongos ayudó a determinar las pérdidas debido al descarte de alimentos contaminados. Se descubrió que el ozono inhibe la germinación de las esporas de algunas especies de hongos, evitando por completo la producción de micotoxinas en algunos casos. Otros aditivos de bajo coste también redujeron drásticamente la producción de micotoxinas. Además, los investigadores descubrieron que el procesamiento de los frutos secos ayudó a la prevención de la contaminación. Posteriormente, los socios del proyecto MYCORED desarrollaron y probaron un sistema de sensores inalámbricos para llevar a cabo un seguimiento de la temperatura, el dióxido de carbono y la humedad en los silos de grano. Además, se desarrollaron kits de pruebas rápidas multitoxinas y estos fueron validados como una manera eficaz de identificar un amplio número de micotoxinas in situ. Finalmente, los socios del consorcio dedicaron buena parte del tiempo y de los esfuerzos a la difusión de los resultados por medio de simposios internacionales, talleres de trabajo, cursos de formación y la publicación de artículos científicos. Los resultados del proyecto MYCORED mejorarán el procesamiento de alimentos en la cadena alimentaria humana y animal, reduciendo las pérdidas tras la recolección y haciendo más seguros los alimentos para el consumo humano.
Palabras clave
Contaminación fúngica, alimentos, salud, micotoxinas, cadena alimentaria animal y humana