Uso de la reacción en cadena de la polimerasa para identificar parásitos
La enteromixosis es una enfermedad especialmente grave para quienes cultivan este pez en el Mediterráneo, ya que el protozoo causante, el Enteromyxum leei, puede acabar con una parte considerable de la población. Pese a los graves daños económicos que causa, hay importantes lagunas científicas sobre los mecanismos patológicos de este parásito, situación que trató de cambiar el proyecto comunitario MYXFISHCONTROL. Científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (España), uno de los socios del proyecto, emplearon la técnica de la reacción en cadena de la polimerasa (PCR) en dos ámbitos de investigación fundamentales, ambos relativos a la propagación del parásito. Antes de nada, es de suma importancia diagnosticar si la enfermedad está presente en una población dada. En caso afirmativo, el procedimiento de cría debe alterarse para evitar a los animales el estrés que causan ciertas actividades. Además, se deben extraer todos los ejemplares maduros infectados. Los científicos constataron la excelente sensibilidad y especificidad de la PCR letal (PCR-L) y la PCR no letal (PCR-NL), que fueron superiores al método convencional, el diagnóstico histológico. Por consiguente, se recomienda el uso de la PCR-NL como test rutinario para detectar posibles infecciones de enteromixosis. La otra rama de este proyecto se centró en el ciclo vital del protozoo mencionado y la posible existencia de un huésped invertebrado intermedio. Así, los científicos cribaron 350 muestras de invertebrados procedentes de viveros cercanos con casos de infecciones empleando la PCR. Entre ellos había anémonas de mar, corales, gusanos poliquetos y crustáceos diversos. Poco más del uno por ciento de las muestras dieron positivo para la presencia de E. leei, lo que niega la posibilidad de que exista algún huésped invertebrado intermedio. Se ha obtenido información útil relativa a la propagación y la forma de detección de este parásito, lo cual son buenas noticias para el sector de la maricultura. Los hallazgos del proyecto contribuyen también a proteger a los peces con valor comercial de los ecosistemas marinos, puesto que la enfermedad mencionada puede transmitirse a numerosas especies salvajes. Por último, la capacidad de diagnóstico rápido y preciso permitirá designar zonas libres del parásito, lo cual redundará en beneficio tanto del consumidor como del productor.