Estudiar el papel del hierro en la enfermedad coronaria
La hemocromatosis hereditaria es un trastorno crónico provocado por una sobrecarga de hierro. Los pacientes absorben demasiado hierro y aumentan los niveles de hierro no unido a la transferrina (NTBI) en el plasma. Esta enfermedad es bastante común en los países europeos, donde una décima parte de la población sufren el riesgo de desarrollar complicaciones ateroscleróticas cerebrales y cardíacas. Con el fin de arrojar más luz sobre esta enfermedad, el proyecto NUTRIENT_IRON_TOXICITY se centró en estudiar los efectos adversos del hierro en la hemocromatosis. Uno de los principales objetivos era la especificación del mecanismo de la toxicidad por NTBI y sus efectos sobre el endotelio vascular que causan arteriosclerosis y el hígado. Uno de los aspectos más importantes del trabajo del proyecto fue la investigación de la relación entre el consumo de hierro hemínico en la alimentación y el riesgo a sufrir la enfermedad coronaria en un amplio grupo de población de mujeres de mediana edad. En el estudio de cohorte participaron mujeres de entre 49 y 70 años durante el período de 1993 a 1997. El estudio culminó en enero de 2000 con un análisis de seguimiento que documentó 252 nuevos casos diagnosticados de enfermedad coronaria. La estratificación de los datos incluyó otros factores de riesgo cardiovascular, períodos menstruales y consumo de antioxidantes para investigar la posibilidad de modificar los efectos. Tras tener en cuenta los factores de riesgo cardiovasculares y nutricionales, se observó que un elevado consumo dietético de hierro hemínico era el responsable de que el riesgo de padecer enfermedad coronaria aumentara un 65%. Los datos demostraron que las mujeres de mediana edad con un consumo relativamente elevado de hierro hemínico son propensas a presentar síntomas de la enfermedad coronaria. Por tanto, es muy importante que las mujeres de este grupo de edad sigan un estilo de vida y una alimentación adecuada para evitar este problema.
