Los nuevos mapas de alta resolución predicen los cambios en la distribución de las mariposas
A pesar de la aceleración del cambio climático, todavía se sabe poco sobre la ecología y distribución de los insectos, vitales para servicios como la polinización. Al ser especies de sangre fría, poco longevas y a menudo especializadas, son muy sensibles a los cambios ambientales, por lo que es crucial identificar las zonas más expuestas a los cambios climáticos y la pérdida de hábitat. Esta información ayudará a orientar los esfuerzos de conservación eficaces para proteger a estos insectos y las funciones esenciales que desempeñan. Financiado por las acciones Marie Sklodowska-Curie, el proyecto PROBAE se diseñó para identificar las regiones en las que las iniciativas de conservación tendrán un mayor impacto para las mariposas, garantizando que los recursos se inviertan sabiamente para proteger la biodiversidad. Mediante modelos matemáticos avanzados, el proyecto se centró en la creación de cientos de mapas de alta resolución para predecir la redistribución actual y futura de las especies de mariposas en toda Europa continental. «Esta iniciativa es fundamental para los países que se esfuerzan por cumplir el objetivo “30 por 30” del Marco Mundial de Biodiversidad, que consiste en dedicar el 30 % de la tierra a la naturaleza para 2030», señala Federico Riva, coordinador del proyecto. «Conseguirlo requiere un planteamiento basado en datos y fundamentado en pruebas empíricas para garantizar el uso más eficiente y eficaz de los recursos». Al proporcionar información valiosa sobre la distribución actual y potencial de las mariposas en el futuro, el equipo de PROBAE contribuirá a la creación de nuevas áreas protegidas que aborden las necesidades inmediatas de conservación a la vez que se preparan para los retos futuros.
Investigación vanguardista sobre las respuestas de las mariposas y la dinámica del paisaje
Durante los ocho meses que duró el proyecto PROBAE obtuvo dos resultados importantes. En primer lugar, la mayor evaluación de cómo todas las mariposas italianas (que constituyen casi la mitad de las especies de mariposas de Europa) responden al uso del suelo y al cambio climático. Además, los investigadores desarrollaron un marco que detalla cómo los modelos de distribución de especies pueden incorporar con mayor precisión aspectos sofisticados de los patrones de uso del suelo, como la fragmentación del hábitat y otros aspectos críticos. Los estudios se han publicado tanto en «Global Change Biology» como en «Journal of Ecology», respectivamente. Dichos logros ayudan a comprender mejor los efectos de la fragmentación del paisaje en las poblaciones de mariposas, un factor crucial para los análisis realizados por PROBAE. «Nuestros hallazgos iniciales destacaron que las mariposas suelen estar restringidas a pequeñas parcelas de hábitat, lo cual las convierte en indicadores ideales para estudiar el impacto de las actividades humanas en paisajes fragmentados», afirma Riva. La influencia de PROBAE va más allá de esos resultados. También ha apoyado la publicación de dos artículos notables, uno que explora la complejidad ecológica y otro que examina los cambios en la biodiversidad de los Alpes suizos.
La cartografía de las mariposas permite detectar y proteger invertebrados olvidados
Aunque el equipo de PROBAE concluyó oficialmente después de que Riva ocupara un puesto de profesor adjunto en Ámsterdam, los trabajos sobre un análisis a escala europea de todas las especies de mariposas prosiguen en el marco de una nueva colaboración. Los primeros resultados de la investigación en curso se presentarán en el próximo «Simposio internacional: el futuro de las mariposas y polillas». «Para finales de 2025, nuestro objetivo es publicar mapas de 1 km de resolución de libre acceso de todas las especies de mariposas de Europa. Se espera que estos modelos de alta resolución desempeñen un papel fundamental en apoyo de los esfuerzos de la Unión Europea por establecer nuevas zonas protegidas y definir una sólida red de infraestructuras ecológicas», afirma Riva. El equipo del proyecto espera que esos mapas ayuden a reducir las distancias y garanticen que los invertebrados reciban la atención que merecen en las iniciativas de conservación de la biodiversidad. «Históricamente, los invertebrados se han omitido en la planificación de la conservación, pero las mariposas, al ser un grupo ampliamente reconocido y carismático, sirven como poderosos defensores para resaltar la importancia crítica de estas criaturas», concluye Riva.
Palabras clave
PROBAE, mariposas, conservación, mapas, biodiversidad, insectos polinizadores, modelos de distribución de especies