Skip to main content
European Commission logo
español español
CORDIS - Resultados de investigaciones de la UE
CORDIS
CORDIS Web 30th anniversary CORDIS Web 30th anniversary

Article Category

Article available in the following languages:

Cielos despejados gracias a la computación en nube

Los investigadores del proyecto E-CONTRAIL utilizan la inteligencia artificial para ayudar a los controladores del tráfico aéreo a predecir y prevenir las nubes persistentes generadas por los gases de escape de las aeronaves.

«Al modificar las maniobras de las aeronaves, es posible evitar regiones sensibles a las emisiones y reducir de forma notable los efectos no relacionados con el CO2».

Manuel Soler, coordinador del proyecto E-CONTRAIL

Las repercusiones climáticas de las emisiones de gases de las aeronaves, como el CO2, están bien documentadas. Investigaciones recientes también han puesto de relieve otros efectos potencialmente negativos, como la creación de estelas de condensación persistentes y de cirros antropogénicos, o nubes de hielo, en la atmósfera. «Nuevos cálculos sugieren que las emisiones distintas al CO2, en concreto el óxido de nitrógeno y los cirros de estelas de condensación, pueden contribuir en dos tercios al forzamiento radiativo mundial de la aviación, lo que las hace dos veces más dañinas que las emisiones de CO2», explica Manuel Soler, director del programa de Doctorado en Ingeniería Aeroespacial de la Universidad Carlos III de Madrid y coordinador del proyecto E-CONTRAIL. Aún no se conocen del todo los efectos de las estelas de condensación sobre el cambio climático. Las variables implicadas están relacionadas con incertidumbres medias y altas y, hasta ahora, la investigación en detalle de esta cuestión ha sido escasa. En el proyecto E-CONTRAIL, financiado a través de la Empresa Común SESAR, los investigadores emplearán inteligencia artificial e imágenes de satélite punteras para efectuar un estudio exhaustivo de las estelas de condensación y la nubosidad inducida por la aviación, así como para cuantificar su impacto ambiental. «La posibilidad de utilizar inteligencia artificial puede ayudarnos a examinar la ubicación geográfica de una aeronave, su altitud y la hora del vuelo para comprender las repercusiones climáticas de las emisiones distintas del CO2 y, gracias a ello, desarrollar estrategias de mitigación», comenta Soler.

Reducir las repercusiones climáticas

En E-CONTRAIL se están desarrollando redes neuronales artificiales innovadoras, que capitalizarán la tecnología de teledetección y los datos satelitales que permiten identificar y clasificar nubes. Al sincronizar la información del tráfico aéreo con estas tecnologías, el equipo podrá diferenciar las estelas de condensación y las nubes inducidas por la aviación de las naturales. El equipo prevé obtener una precisión de detección de estelas de condensación superior al 90 %, lo que reducirá de forma notable las incertidumbres actuales en la investigación sobre las repercusiones climáticas distintas al CO2 provocadas por la aviación. A largo plazo, el proyecto proporcionará información adaptada a las necesidades de las partes interesadas en la aviación, lo que contribuirá a avanzar hacia un sistema de gestión del tráfico aéreo climáticamente neutro. «Al modificar las maniobras de las aeronaves, como la hora de salida, la altitud, la trayectoria lateral y el perfil de velocidad, es posible evitar regiones sensibles a las emisiones y reducir de forma notable los efectos no relacionados con el CO2», señala Soler. A lo que añade que en el proyecto conexo FlyATM4E, también financiado a través de la Empresa Común SESAR, se ha demostrado que este planteamiento podría reducir el clima.

Palabras clave

aviación, Empresa Común SESAR, sostenibilidad, neutralidad en carbono, gestión del tráfico aéreo, GTA, Pacto Verde, impacto ambiental, Horizonte Europa, Cielo Digital Europeo, emisiones, reducción