Skip to main content
European Commission logo
español español
CORDIS - Resultados de investigaciones de la UE
CORDIS
CORDIS Web 30th anniversary CORDIS Web 30th anniversary

Cryosphere-Carbon on Top of the Earth (CC-Top): Decreasing Uncertainties of Thawing Permafrost and Collapsing Methane Hydrates in the Arctic

Article Category

Article available in the following languages:

Los gigantes durmientes del ciclo del carbono mundial

Los gases de efecto invernadero que liberamos a la atmósfera son solo la punta del iceberg del calentamiento global. Las emisiones de metano que genera el deshielo del permafrost probablemente se convertirán en un problema significativo durante las próximas décadas. El proyecto CC-TOP exploró su posible impacto.

Cambio climático y medio ambiente icon Cambio climático y medio ambiente

El derretimiento del hielo del Ártico no solo aportará agua dulce a nuestros océanos, sino que también liberará gases de efecto invernadero como el metano atrapado en el permafrost, algo que complica las predicciones del calentamiento global. Todavía no sabemos la cantidad de estos gases que se evaporarán a la atmósfera, cuándo ni cómo afectarán al clima actual. En este sentido es en el que CC-TOP (Cryosphere-Carbon on Top of the Earth (CC-Top): Decreasing Uncertainties of Thawing Permafrost and Collapsing Methane Hydrates in the Arctic) puede marcar la diferencia. Tras cinco años de intensa investigación financiada por el Consejo Europeo de Investigación, Örjan Gustafsson ha logrado descubrir valiosos datos sobre lo que denomina los «gigantes durmientes del ciclo del carbono mundial». «Ahora estamos más cerca de obtener unas predicciones científicamente sólidas sobre las emisiones de metano durante los próximos decenios y siglos», afirma Gustafsson, catedrático en el Departamento de Ciencias Medioambientales de la Universidad de Estocolmo. «CC-TOP nos da más información sobre el vínculo entre el carbono y el clima y los hidratos de metano, en particular para el permafrost en tierra, a lo largo de la costa y bajo el mar». Gustafsson y su equipo buscaron a estos gigantes por el distante océano Ártico en Siberia oriental. Lo lograron gracias a la identificación avanzada de huellas isotópicas y moleculares de las fuentes y los flujos de materia orgánica, así como del metano liberado por el deshielo del permafrost. «Cabe destacar que hemos desarrollado una práctica forense de fuentes de tres isótopos para emisiones masivas de metano en la placa ártica de Siberia oriental, la zona costera más grande del mundo. Esto nos ha permitido realizar mediciones de alta precisión de isótopos estables de carbono, hidrógeno y carbono radioactivo de abundancia natural», explica Gustafsson. Este método ayudó al equipo de Gustafsson a determinar la proporción de metano emitido procedente de fuentes biogénicas próximas a la superficie, del deshielo del permafrost submarino y de los depósitos profundos de metano termogénico que atraviesan el permafrost que se descongela.

Nuevos conocimientos sobre el permafrost submarino

El proyecto dio lugar a más de treinta publicaciones, ocho de ellas en revistas de gran impacto como «Science», «PNAS» y «Nature». Además, recopiló la primera base de datos de ciencia abierta sobre la distribución y las fuentes de carbono en todos los sedimentos del océano Ártico. Los estudios del proyecto sobre los períodos pasados de calentamiento rápido han descubierto una correlación entre las emisiones masivas de carbono del permafrost y los incrementos rápidos de CO2 atmosférico. Tal y como señala Gustafsson: «Esto sugiere que el paradigma reinante del océano que libera carbono quizá deba complementarse con una removilización del metano/carbono terrestre. Esto puede ser tan solo un adelanto de lo que nos depara el cambio climático actual». Además, aportan nuevos datos sobre el permafrost submarino. «Nuestros estudios indican que el permafrost que actualmente se encuentra bajo las aguas oceánicas superficiales en la placa ha alcanzado recientemente el punto de deshielo. Durante las últimas décadas, se ha derretido a una velocidad diez veces mayor que el permafrost terrestre», añade Gustafsson. Y continúa diciendo: «Las observaciones de los focos de emisiones de metano en el mar de Láptev también revelaron que la principal fuente de metano allí es una reserva termogénica profunda. Esto sugiere que puede producirse una liberación rápida de ese metano previamente formado». Gracias a la distribución en fuentes de isótopos de las partículas de aerosol negras de carbono alrededor de la costa del Ártico, que calcula la aportación de fuentes de contaminación como motores diésel o la combustión de madera, el equipo incluso obtuvo bases científicas firmes para centrarse en las fuentes de emisiones dominantes en las medidas de mitigación. La red internacional de CC-TOP sigue muy activa. Hay previstas diversas expediciones internacionales de gran envergadura, tanto en rompehielos como en buques de investigación rusos y suecos, y Gustafsson espera completar pronto otra propuesta para el CEI. El investigador concluye haciendo hincapié en que: «Los resultados del proyecto nos inspiran para dar un paso adelante y empezar a controlar el cambio climático. El decenio actual será esencial para ganar esta batalla».

Palabras clave

CC-TOP, Ártico, permafrost, metano, ciclo del carbono, contaminación, hielo, isótopo, cambio climático

Descubra otros artículos del mismo campo de aplicación