Tejidos desechados como materia prima para la industria química y la textil
Se estima que la industria textil de la Unión Europea genera 16 millones de toneladas anuales de residuos, y casi dos terceras partes de estos residuos acaban en vertederos o incinerados, lo que tiene un impacto medioambiental considerable y conlleva costes elevados. Además, los recursos valiosos que no se recuperan en el flujo de desechos se acaban perdiendo. RESYNTEX propone cambiar esta situación mediante un proyecto piloto innovador: una planta de reciclado de tejidos capaz de procesar cien toneladas de residuos al año. Esta instalación piloto situada en Eslovenia transforma residuos textiles en materias primas secundarias para la industria química y la textil, lo que a su vez genera circularidad y reduce el impacto medioambiental de sus actividades. El proyecto utiliza tecnologías innovadoras que abarcan toda la cadena de valor textil. Los residuos de tejidos separados se tratan por medios químicos para extraer recursos como fibras proteínicas con las que generar adhesivos para paneles de madera y fibras de celulosa destinadas a la producción de bioetanol. Ahora los investigadores están ampliando los métodos de hidrólisis química más prometedores para obtener materias primas a fin de generar plástico biodegradable. También se llevaron a cabo pruebas en los procesos de recuperación de la poliamida (PA) y el tereftalato de polietileno (PET) para la producción de nuevos plásticos y sustancias químicas. Los investigadores lograron que el proceso de degradación del PET fuese más ecológico y rentable. El ácido tereftálico químico de calidad superior se puede utilizar en el ámbito industrial y podría ser una materia prima secundaria para el envasado en plástico. El etilenglicol, otra sustancia química recuperada, se podría emplear como agente descongelante.
Un método holístico para reciclar y reutilizar tejidos
La simbiosis industrial es el proceso por el que los residuos o los subproductos de un proceso industrial se convierten en la materia prima de otro. «Tanto la industria textil como la química pueden sacar provecho del uso de los flujos de tejidos secundarios. Las fibras de tejidos de baja calidad recicladas como nuevos productos químicos tienen una nueva vida en lugar de desecharse o incinerarse», explica la coordinadora técnica del proyecto, Aleksandra Lobnik. «Para reciclar las fibras y convertirlas en materias primas de alto valor, es necesario separar los tejidos con precisión, dado que la mitad de ellos son mezclas de fibras. Todavía no hay en el mercado tecnologías que trabajen con mezclas de fibras», explica Lobnik. Es más, si bien se ha invertido considerablemente en la conversión de plásticos a tejidos, de tejidos a tejidos o de tejidos a innovaciones químicas, aún no se ha dado con una tecnología sencilla de reciclado mecánico. RESYNTEX empleó un método holístico para abordar la naturaleza fragmentada del procesamiento de residuos textiles y demostró la eficacia de una tecnología automática de separación de fibras que genera un material textil con un porcentaje de limpieza del 85 % y una pureza muy alta del 99 %. La tecnología separa las fibras por su composición y se complementa con el empleo de la tecnología de espectroscopia del infrarrojo cercano. Los socios del proyecto integraron el proceso de separación automatizado con los procesos químicos y enzimáticos más prometedores para la extracción de fibras naturales a base de proteína y celulosa, además de fibras de poliamida y poliéster. En el proceso también se integraron el tratamiento de residuos sólidos y líquidos y las tecnologías de reciclaje de agua.
Los tejidos en la economía circular europea
Para poder reducir el impacto ambiental de la producción y el consumo de tejidos, sin renunciar a las ventajas económicas y sociales, es necesario un giro sistémico hacia la circularidad. En 2020, EURATEX, uno de los socios del proyecto, publicó un documento de síntesis con recomendaciones sobre la política de responsabilidad ampliada del productor (RAP), ya que, en su opinión, la mayoría de estas se idearon para modelos económicos lineales. RESYNTEX está en consonancia con las recomendaciones de EURATEX para lograr una sostenibilidad mucho más amplia en toda la cadena de valor textil. Sus procesos químicos y de reciclaje sostenibles aprovechan el valor de los textiles de posconsumo y crean un punto de inflexión para la industria textil de ciclo cerrado. La planta piloto en Eslovenia continúa en funcionamiento. Los miembros del consorcio trabajan con el objetivo de mejorar y ampliar el proceso RESYNTEX.
Palabras clave
RESYNTEX, fibras, residuos textiles, reciclado, materias primas, industria química, economía circular, responsabilidad ampliada del productor