La lengua de signos consigue tener voz
Un gran número de personas de todo el mundo sufre deficiencias auditivas. Según la Organización Mundial de la Salud, unos 466 millones de personas en todo el mundo sufren pérdida auditiva incapacitante, de los que 34 millones son niños. Los últimos avances en materia de aprendizaje automático y electrónica de consumo ofrecen la oportunidad de desarrollar una ayuda tecnológica que verdaderamente cambie la vida a las personas con problemas de audición. El proyecto financiado con fondos europeos Talking Hands ha creado un innovador dispositivo de reconocimiento de gestos portátil y fácil de utilizar para las personas con problemas de audición. «Imagine un dispositivo que permita hablar a las personas sordas. Imagine una empresa que combine beneficios e inclusión social. Talking Hands es la única solución con estas características», señala Francesco Pezzuoli, coordinador del proyecto. Estudio de las personas con problemas de audición El equipo se comprometió ampliamente con la comunidad sorda en su camino hacia la comercialización del producto. Pezzuoli destaca: «En el camino de comercialización de una idea, se presentan muchos obstáculos, especialmente al principio del viaje, e incluso puedes pensar en tirar la toalla. Pero cuando recibes correos electrónicos y llamadas de personas sordas y padres de niños sordos que te animan y confirman que están a la espera de tu producto, te esfuerzas más, porque crees que tu trabajo sí merece la pena». Los socios del proyecto también llevaron a cabo una extensa investigación, revisando la bibliografía académica para entender qué tecnología se ha utilizado para ayudar a las personas con problemas de audición. Descubrieron que la investigación sobre la traducción de la lengua de signos abarca décadas y muchos otros científicos se han dedicado a ella, pero pocos han logrado su comercialización. Pezzuoli explica: «Llevamos a cabo nuestra investigación desde una perspectiva comercial, ya que nuestro objetivo es conseguir un producto fácil de utilizar. Incluso aunque Talking Hands realice una traducción perfecta de una lengua de signos completa, debe ser una experiencia de comunicación satisfactoria para el usuario». Construcción de un prototipo que funciona Pezzuoli y su equipo se valieron de su revisión de la bibliografía académica para determinar cuáles eran los mejores sensores y componentes electrónicos para su producto. Después de meses de trabajo, finalmente lograron el funcionamiento de un prototipo compuesto por un guante de jardinería, equipos electrónicos cotidianos y un algoritmo simple. Pezzuoli relata: «Para entonces, tuvimos que mejorar cada parte; desarrollamos varios prototipos y analizamos distintas soluciones. Finalmente, quedamos satisfechos con el producto y ahora creemos que está listo para su comercialización». El equipo se enfrentó a algunos retrasos inesperados además de ciertos problemas técnicos debido a las distintas necesidades existentes entre las personas con problemas de audición. Pezzuoli indica: «Se han iniciado algunos proyectos similares en distintas partes del mundo, y nadie ha tenido éxito en el mercado con un producto útil. Hemos superado algunos de estos desafíos y las primeras impresiones de los usuarios han sido muy buenas». Preparación del producto para su comercialización El equipo tiene previsto introducir un producto de alta calidad en el mercado ahora que ya cuentan con un prototipo que funciona. En los próximos meses, planean probar la versión beta de su producto con un centro de educación secundaria de Roma, especializado en la enseñanza a niños con problemas de audición. Tras una revisión final, el equipo comercializará Talking Hands con el apoyo de fondos privados y públicos. Pezzuoli señala: «Hemos perdido la cuenta de las veces que nos han preguntaron por qué no nos trasladamos a los Estados Unidos para desarrollar nuestro negocio. Creemos que el valor más importante de la subvención del Instrumento PYME es el gran mensaje de que ya no estamos presentes solo en Italia, sino en Europa».
Palabras clave
Talking Hands, sordo, persona con problemas de audición, lengua de signos, discurso, aprendizaje automático, inclusión social