Diseños revolucionarios en las aulas
Imaginemos lo mucho que aprendería un niño si estuviese sentado con comodidad, sin tensiones y con plena libertad para absorber los conocimientos. El diseño y la configuración de un entorno óptimo para el aprendizaje son tareas que requieren aportaciones desde los ámbitos del diseño industrial, la ergonomía, la educación, la pedagogía y la fisioterapia. El proyecto TFE, financiado con fondos de la UE, realizó un inventario del mobiliario escolar y de nuevos productos relacionados. Los objetivos de este proyecto fueron la adquisición y transmisión de conocimientos para diseñar nuevos productos. Gracias a una metodología innovadora, los investigadores evaluaron el mobiliario existente en la actualidad y lo compararon con estándares de salud física y mental. Estos estándares, revisados no hace mucho, incorporaron la información más actualizada sobre higiene postural. Sentarse ante un ordenador durante muchas horas al día mientras se estudia o se lee puede generar una tensión perjudicial en cuello y espalda. Se tuvieron en cuenta este tipo de problemas, así como otros derivados de las tecnologías actuales. En estos momentos, el proyecto se encuentra en su fase intermedia y continuará congregando a investigadores para forjar lazos académicos duraderos que puedan seguir marcando el rumbo de los estudios de investigación. Gracias a estas relaciones, el consorcio recopilará y difundirá la información recabada sobre posturas, espacio físico, aprendizaje y tecnología. El diálogo entre los investigadores y el sector comercial facilita la mejora del entorno educativo a un nivel que podría abarcar todo el planeta. El proyecto seguirá adelante con sus patentes, derechos de autor y ventas comerciales en asociación con entidades que ya han manifestado su interés al respecto.
Palabras clave
Posición del esqueleto, ergonomía, mobiliario escolar, higiene postural