Camino abierto para los productos ecológicos
Las normativas europeas que respaldan los métodos de producción respetuosos con la conservación del medio ambiente y del entorno rural están surtiendo efecto. En lo relativo al mercado de productos ecológicos, se ha producido una ampliación de la base de suministro. Así pues, para que todos los participantes en el mercado de la producción de alimentos ecológicos aprovechen al máximo el cambio de paradigma agrícola europeo, el proyecto comunitario OMIARD propuso el desarrollo de estrategias de comercialización eficaces. Los miembros del consorcio lo consiguieron mediante un examen exhaustivo de «iniciativas para la comercialización de productos ecológicos» (Organic Marketing Initiatives, OMI). Socios del Institut National de la Recherché Agronomique en Alto Garona (Francia) examinaron las OMI de manera integral. Mediante cuestionarios realizados a gestores y expertos externos, el equipo recopiló información valiosa con el fin de utilizarla en la redacción de directrices para todos los niveles del mercado de productos ecológicos. En total analizaron 67 casos prácticos de 35 regiones europeas que permitieron reflejar la enorme diversidad de condiciones existentes en Europa en este tipo de mercado. Los datos de la evaluación demostraron que para lograr el éxito eran más determinantes ciertos factores intrínsecos de las empresas dedicadas al mercado ecológico que los externos. Así pues, un plan estratégico basado en fundamentos económicos solía aportar más beneficios empresariales que las consideraciones medioambientales. La parte negativa de este enfoque es que podrían desatenderse matices clave para la buena marcha de estas empresas, por ejemplo los contactos regionales. En general, se estableció que los puntos más críticos son la reducción de los costes logísticos como el transporte y el almacenado, y la mejora de la oferta de productos en términos de calidad y cantidad adecuada. También se recomendó la mejora de los enlaces de suministro y los contactos en toda la cadena debido a la ampliación de la base de suministro. La expansión de métodos ecológicos más tradicionales es una buena noticia para las zonas rurales que se enfrentan a la disminución de su población. Puesto que la producción ecológica es más laboriosa, posee un gran valor en las zonas periféricas menos desarrolladas de Europa. De este modo, se pueden conservar amplias zonas de extraordinaria belleza natural que atesoran comunidades complejas de flora y fauna.
