Comprender las necesidades sanitarias de las personas con síndrome de Down
Una nueva investigación que cuenta con el apoyo del proyecto GO-DS21, financiado con fondos europeos, aporta valiosos conocimientos sobre los problemas de salud que experimentan las personas con síndrome de Down a lo largo de su vida. El estudio, publicado en la revista «The Lancet Public Health», amplía nuestros conocimientos sobre las necesidades de las personas con esta enfermedad en comparación con las personas con otras discapacidades intelectuales. Como se informa en el sitio web del King's College de Londres, socio del proyecto GO-DS21, este estudio es el primero que investiga la morbilidad múltiple a lo largo de la vida en personas con síndrome de Down. Aunque es bien sabido que las personas con síndrome de Down tienen más probabilidades de desarrollar determinadas enfermedades, se ha investigado muy poco sobre el patrón de dichas afecciones a lo largo de su vida y sobre cómo se relacionan estos trastornos entre sí. La falta de información ha provocado muchas muertes por causas evitables que podrían prevenirse con una mejor asistencia sanitaria. La esperanza del equipo de investigación es que sus hallazgos conduzcan a «un seguimiento, apoyo y tratamiento correctos de las enfermedades a las edades adecuadas». El equipo utilizó para su investigación datos electrónicos obtenidos de consultas médicas del Reino Unido durante el período comprendido entre enero de 1990 y junio de 2020. A partir de esos datos, compararon los historiales médicos de unas 10 200 personas con síndrome de Down, 69 150 personas con discapacidad intelectual y más de 39 800 personas de la población general que actuaron como grupo de referencia.
Altibajos
Los investigadores descubrieron que, en comparación con la población general, las personas con síndrome de Down presentaban un mayor riesgo de demencia, hipotiroidismo, epilepsia y neoplasias hematológicas (p. ej., leucemia). Sin embargo, tenían menos probabilidades de padecer asma, cáncer (tumores sólidos), cardiopatía isquémica y, sobre todo, hipertensión arterial. En comparación con las personas que padecen otras discapacidades intelectuales, el riesgo de demencia, hipotiroidismo y neoplasia hematológica volvió a ser mayor en las personas con síndrome de Down, y la apnea obstructiva del sueño sustituyó a la epilepsia como mayor riesgo en esta categoría. Sin embargo, se observó que tenían menos riesgo de padecer enfermedades como asma, cáncer (tumores sólidos), trastornos del sueño, diabetes y glaucoma. El estudio también reveló que las personas con síndrome de Down que padecen una enfermedad tienen más probabilidades de presentar también otras afecciones. La noticia del King’s College de Londres ofrece ejemplos. Es probable que las personas obesas con síndrome de Down también padezcan apnea obstructiva del sueño, demencia y problemas de tiroides. Además, quienes sufren una enfermedad cardiovascular también tienen más probabilidades de padecer otra, como cardiopatía isquémica. «Los resultados de este análisis proporcionan a los profesionales sanitarios un conocimiento más detallado sobre las necesidades sanitarias de las personas con síndrome de Down, y de aquellas con discapacidad intelectual, lo cual permitirá orientar la atención a estos grupos para reducir las desigualdades», afirma en la noticia el autor principal del estudio, el profesor André Strydom, del King’s College de Londres. El proyecto GO-DS21 (Gene overdosage and comorbidities during the early lifetime in Down Syndrome) finaliza en 2025. Para más información, consulte: Sitio web del proyecto GO-DS21
Palabras clave
GO-DS21, síndrome de Down, discapacidad, discapacidad intelectual