El papel central de la imaginación en la formación del conocimiento humano
Uno de los mayores dones de la humanidad es la capacidad para pensar cómo podría, debería o no debería ser el mundo, en lugar de limitarse a valorar cómo es en realidad. Sin embargo, todo está en la mente, ¿verdad? No exactamente. En muchos casos, este «pensamiento contrafactual» es mucho más que una suposición fantasiosa. Este enfoque podría incluso tener beneficios cognitivos reales, siempre que evaluemos correctamente las condicionales contrafactuales sobre cómo podrían ser las cosas. «El proyecto CKI parte de la hipótesis de que la imaginación es la forma humana básica de evaluar condicionales contrafactuales», afirma Margot Strohminger, beneficiaria de una beca individual de investigación de las Acciones Marie Skłodowska-Curie (MSCA). «Pero la imaginación suele contar con asistencia. El cerebro necesita información, datos estadísticos, modelos informáticos, etc. Al fin y al cabo, si tomamos la COVID-19 como ejemplo, vemos que toda esa información alimenta una labor de imaginación colectiva para evaluar si se han tomado las medidas adecuadas en el momento oportuno. Utilizamos este mismo proceso básico para evaluar otras presunciones de la imaginación, por ejemplo, para determinar si algo es posible o imposible». Si bien los enfoques de investigación tradicionales tienden a considerar la ficción como el objetivo principal de la imaginación, ignorando su función cognitiva más básica, en CKI (Counterfactual Knowledge from the Imagination) la imaginación se entiende ante todo como una herramienta que delinea mundos posibles para ayudarnos a comprender mejor el que nos rodea. La idea de estos mundos posibles la exploró largo tiempo David Lewis (un filósofo muy influyente del siglo XX), quien llegó incluso a considerarlos reales y coexistentes con el mundo en el que vivimos. Aunque el proyecto CKI no va tan lejos, utiliza este conocido concepto filosófico para comprender mejor las condicionales contrafactuales.
El puente perdido
«Un mundo posible es como una historia completa en todos sus detalles, que no deja preguntas sin respuesta, a diferencia de cualquier novela que se haya escrito», añade Timothy Williamson, profesor de Lógica en la www.ox.ac.uk (Universidad de Oxford) e investigador principal del proyecto CKI, respaldado por las (MSCA). «Pero, aunque no podamos comprender nunca el alcance de semejante mundo contrafactual, sí que podemos llegar a conocer algunas de sus condicionales y razonar con ellas. Por ejemplo, puedo averiguar que, si hubiera tomado otro camino, no habría quedado atrapado en un embotellamiento». En el transcurso de dos años, los dos investigadores publicaron varios artículos esclarecedores. A su vez, arrojaron nueva luz sobre el uso de la heurística básica para evaluar condicionales (si X, entonces Y) o para analizar cómo utilizamos la imaginación para dar respuesta a muchas preguntas modales comunes (por ejemplo, ¿es posible que mañana corra diez kilómetros en menos de una hora?). Incluso demostraron que los procesos imaginativos que sustentan los paradigmas del conocimiento «a priori» y los del conocimiento «a posteriori» son muy similares. «En otro ejemplo, el proyecto ha hallado estrechas analogías entre el aprendizaje adquirido a partir de la imaginación y el basado en la visión y otras formas de percepción sensorial. También ha confirmado la hipótesis inicial de que la forma humana básica de evaluar las condicionales contrafactuales se halla en la imaginación, al mostrar lo mucho que la imaginación puede explicar», añade Williamson. En su conjunto, CKI ofrece una visión refrescante de la imaginación como elemento central del conocimiento humano y demuestra que el arte, los videojuegos, las novelas o las películas conllevan beneficios añadidos a su finalidad principal. Una vez finalizado el proyecto, Strohminger ha decidido iniciar uno nuevo sobre la forma en que atribuimos estados mentales a los demás (denominada en ocasiones «lectura mental») en la imaginación.
Palabras clave
CKI, imaginación, filosofía, mundos posibles, pensamiento contrafactual