La herramienta definitiva para el compromiso ciudadano en proyectos locales
Ante la pregunta de qué le depara el futuro a nuestras ciudades, cabe una respuesta clara: según las Naciones Unidas, para 2050 casi el 70 % de la población mundial vivirá en entornos urbanos. Sin embargo, lo que los urbanistas tienen todavía que averiguar es cómo garantizar el bienestar de estos cada vez más numerosos habitantes de las ciudades. Esto hace necesaria una administración abierta, en la que los ciudadanos se sientan parte de un proyecto más grande. «Los ciudadanos se están cansando de votar decisiones que ya se han tomado. Quieren contribuir de forma activa y compartir sus ideas», explica Vaneta Ivanova, gestora de proyectos en el Instituto Fraunhofer para Investigación en Computación Gráfica (IGD) y coordinadora del proyecto smarticipate (smart services for calculated impact assessment in open governance) junto a su compañero Joachim Rix. Esta necesidad ya ha dado lugar a la creación de varias herramientas en línea que habilitan una democracia participativa. Sin embargo, suelen carecer de una propuesta que permita a los ciudadanos tener una vista previa de los proyectos propuestos. Smarticipate suple esta carencia y permite el despliegue de una democracia participativa en la misma plataforma. Los ciudadanos, las organizaciones no gubernamentales, las empresas y las administraciones públicas pueden proponer proyectos, proporcionar modelos en dos y tres dimensiones y permitir a los impulsores de los proyectos compartir sus puntos de vista y recibir comentarios en tiempo real. «Digamos que utiliza la bicicleta de forma asidua, por ejemplo. Puede proponer aparcamientos para bicicletas que sean seguros en lugares que no los tengan. También puede sugerir puntos de recarga para bicicletas y coches eléctricos o nuevos carriles bici. Otros ciudadanos interesados comentarán o votarán por un proyecto concreto, y la iniciativa puede vincularse con una iniciativa de financiación colectiva», añade Ivanova.
De los planes a la acción
Además de hacer comentarios sobre los planes que están llevando a cabo, también pueden hacerse propuestas y verlas materializadas en dos y tres dimensiones. A partir de ahí, el sistema ofrece comentarios en tiempo real sobre la viabilidad de la propuestas e impulsa la transparencia. Usuarios como las autoridades públicas y los centros de innovación han probado ampliamente la herramienta y la han encontrado muy útil y fácil de usar. El aspecto más valioso de smarticipate es su capacidad para evitar situaciones en las que una administración pública realiza un proyecto solo para ver cómo es rechazado y cuestionado por la población local. Ahora los ciudadanos pueden hacer propuestas basadas en escenarios de planificación participativa (historias urbanas) y hacer comentarios, y, a partir de ellos, las administraciones públicas pueden decidir si la propuesta es viable. Para las ciudades de Roma, Londres y Hamburgo, se desarrollaron pilotos en materia de jardinería urbana, planificación de construcción tridimensional y plantación de árboles. El consorcio ha trabajado con las tres ciudades para incluir smarticipate en sus planes de democracia participativa. Ahora que el proyecto ha finalizado, el Fraunhofer IGD y otros miembros del consorcio se han centrado en la comercialización de un sistema definitivo y rediseñado. A finales de 2020, se creará una empresa derivada. Según Ivanova: «Se está realizando un análisis de mercado detallado». Smarticipate se ofrecerá como plataforma genérica, que incluirá la versión de prueba de los tres temas ya desarrollados, con la opción de añadir más licencias. Los clientes podrán poner en práctica una de estas aplicaciones, ajustarla y adaptarla a la interfaz de usuario, o crear una aplicación o tema completamente nuevos. La versión 1.0 de la plataforma estará disponible a finales de septiembre de 2020, junto con un hackatón para fomentar nuevas ideas y más casos de uso. «Nuestro objetivo es contribuir a una infraestructura más verde, mejor, moderna y práctica en nuestro vecindario más próximo mediante el apoyo a los responsables políticos en sus decisiones de inversión. El proyecto smarticipate ofrece un mercado en el que se pueden crear y compartir fácilmente aplicaciones de participación ciudadana y en el que se gestionan campañas de participación. Los usuarios pueden crear sus propias aplicaciones, por ejemplo para planificar estaciones de recarga para la movilidad eléctrica, sin necesidad de expertos en programación», concluye Ivanova.
Palabras clave
smarticipate, participación ciudadana, inteligente, urbanistas, administración abierta, democracia participativa, vecindario, jardinería urbana