Los virus y su importante función en los ecosistemas de las profundidades marinas
De acuerdo con una investigación financiada con fondos comunitarios y publicada el 28 de agosto en la revista Nature, los virus desempeñan un papel fundamental en los ecosistemas de las profundidades marinas. El estudio desvela que los virus son la causa principal de la muerte de microorganismos que moran en los sedimentos del suelo marino. Los nutrientes que liberan estas bacterias al morir son inmediatamente aprovechados por otros organismos. De esta forma, los virus aceleran el flujo de nutrientes como el carbono y el nitrógeno por todo el ecosistema. Las profundidades marinas suponen las dos terceras partes de la superficie de la Tierra, y la forma de vida predominante en los sedimentos allí depositados son las bacterias. «En un gramo de sedimiento hay entre cien millones y cien mil millones de bacterias», informó a Cordis Noticias Antonio Dell'Anno, uno de los autores del artículo y profesor de la Universidad Politécnica de Las Marcas (Italia). «En la totalidad del planeta, esto supone una cantidad enorme de carbono.» En este estudio, científicos de Francia, Italia y Estados Unidos recogieron más de doscientas muestras de sedimentos de las profundidades marinas en diversos lugares de los océanos Pacífico y Atlántico y de los mares Mediterráneo y Negro. Las muestras se tomaron a profundidades que variaron desde los 165 metros hasta más de 5.000 metros. El objetivo era el estudio de la interacción entre bacterias y virus en entornos tan hostiles como los indicados. Los científicos descubrieron que los virus provocan casi la totalidad de la mortalidad bacteriana en los sedimentos de las profundidades marinas y que a profundidades mayores de mil metros la mortalidad se acerca al cien por cien. Los virus consiguen abrir las bacterias, de forma que su contenido plasmático se libera en el entorno. Estos nutrientes son aprovechados de forma inmediata por otras bacterias sanas. El profesor Dell'Anno describe el proceso como una especie de «canibalismo en las profundidades marinas» que sin duda acelera el ciclo del carbono. «El carbono se recicla, al igual que otros nutrientes», explicó el profesor Dell'Anno. Los investigadores estiman que este proceso mueve de 0,37 a 0,67 gigatoneladas de carbono al año a través de la cadena trófica de las profundidades marinas. «Nuestros resultados indican que los virus desempeñan un papel importante en los ciclos biogeoquímicos, en el metabolismo del fondo oceánico y en el funcionamiento general del mayor ecosistema de nuestra biosfera», concluyen los investigadores. El equipo tiene ahora interés en identificar los virus involucrados en estos procesos e investigar con más detalle el papel que desempeñan en el mantenimiento de la biodiversidad en el medio de las profundidades marinas. Las profundidades oceánicas también desempeñan un papel importante en el ciclo global del carbono, pero los modelos informáticos del ciclo del carbono, a día de hoy, no tienen en cuenta la acción de estos virus. Así pues, el equipo se ha propuesto la meta de lograr que dichos modelos tengan en cuenta la influencia de estos virus. La comunidad científica es consciente desde hace tiempo de que los virus son los causantes de la elevada mortalidad que se registra en las capas superiores del océano, pero hasta ahora no existía ningún estudio exhaustivo sobre la situación en las profundidades oceánicas. El mero hecho de obtener muestras de sedimentos de las profundidades supone retos técnicos de gran magnitud. Además, las muestras han de mantenerse y estudiarse a la misma presión extrema y baja temperatura que se dan en el fondo del océano, lo que requiere la utilización de equipos muy especializados y costosos. El apoyo de la UE a esta investigación provino del proyecto HERMES («Investigación sobre focos de biodiversidad en las márgenes de los mares europeos»), que está financiado mediante el área temática «Desarrollo sostenible, cambio global y ecosistemas» del Sexto Programa Marco (6PM).