Expertos piden más esfuerzos para tratar las infecciones zoonóticas emergentes
La aparición de zoonosis, que son enfermedades transmitidas entre los animales vertebrados y los humanos, sigue en aumento, según el último informe del Consejo Asesor Científico de las Academias Europeas (EASAC). Para abordar el problema, este informe insta a aumentar de forma considerable los esfuerzos para completar las lagunas en la investigación sobre este tipo de infecciones, así como a implantar mejores mecanismos de control y aumentar la cooperación internacional. Un agente zoonótico puede ser una bacteria, un virus, un hongo, un parásito u otros agentes transmisibles. Muchos de éstos se encuentran en los alimentos y proceden del ganado doméstico, como es el caso de la salmonella. Se sabe que más de 1.400 especies de agentes infecciosos son patógenas para los humanos y alrededor del 60% de éstas son zoonóticas. La mayoría de patógenos «nuevos» presentes en los humanos que se han descubierto en los últimos veinticinco años tienen origen zoonótico, y se prevé que el riesgo de infección seguirá en aumento a causa de los cambios en el clima global y en el medio ambiente, y también debido al aumento de la migración y la movilidad. «Dentro del espacio europeo ya se han realizado grandes progresos en el tratamiento de las zoonosis emergentes, pero aún queda mucho por hacer», afirmaron fuentes del EASAC. La vigilancia de las zoonosis es un área que requiere una atención continua, según indica el informe. Algunos de los avances más importantes en este campo han sido la introducción de un sistema de alarma a nivel europeo, el trabajo del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (CEPCE) para la creación de registros sobre enfermedades, y la labor de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (AESA), que alerta de brotes de enfermedades derivados de alimentos. El informe manifiesta que ahora se debería prestar atención especial a estandarizar mejor la recogida y extracción de datos, así como formular nuevos métodos para controlar los agentes zoonóticos tanto en animales domésticos como no domésticos. En el informe también se insta a aumentar los vínculos entre el CEPCE y la AESA para asegurar un rápido intercambio de información sobre zoonosis derivadas de alimentos. Además, la Comisión Europea y el Parlamento Europeo deberían aumentar su apoyo a iniciativas internaciones tales como el Global Early Warning System («Sistema Global de Alerta Rápida»), así como prestar mayor atención a este tipo de enfermedades y al impacto de las mismas sobre áreas políticas tales como la migración y la sanidad. En cuanto a la investigación, el EASAC señala que se necesitan grandes esfuerzos a nivel europeo para solucionar las grandes lagunas que hay en el campo de las zoonosis transmitidas por vectores, sobre todo en la biología de vectores, la distribución y la evolución, y en las zoonosis transmitidas por el contacto con animales y plantas. «Aunque apreciamos que la Comisión Europea atienda a muchas de las inquietudes de la comunidad investigadora respecto a la falta de financiación, parece haber una verdadera insuficiencia de inversión en la investigación básica impulsada por investigadores en el campo de las enfermedades infecciosas, salvo en el caso excepcional de la gripe. Aún podemos mejorar en lo que respecta a entender los mecanismos de transmisión entre especies, la patogenicidad y la adaptación a los huéspedes, incluyendo los factores moleculares determinantes de la especificidad de los huéspedes», señalan los autores del informe. Con el fin de movilizar recursos de financiación a favor de la excelencia en la investigación, el informe recomienda que la toma de decisiones políticas se centre en promover la inversión en nuevos productos de diagnóstico, tales como un chip de diagnóstico dotado de una amplia cobertura virológica. También se requiere un mayor apoyo por parte de la Plataforma Tecnológica Europea para la Salud Animal Global y de la Iniciativa Tecnológica Conjunta sobre Medicamentos Innovadores para fomentar la participación de todas las partes interesadas con vistas a dar prioridad al estudio de enfermedades.