Las academias científicas exhortan al G8 a no perder de vista los problemas que presentan algunas enfermedades
Las academias científicas de 12 países han exhortado a los líderes mundiales, y más en particular a los del G8, a no permitir que el interés actual por la gripe aviar vaya en detrimento de los trabajos en curso para la erradicación de enfermedades claramente establecidas, en especial la tuberculosis (TB), la malaria y el VIH/SIDA. Se insta además al G8, del que forman parte la UE y cuatro de sus Estados miembros, a introducir estrategias globales que permitan hacer frente a todas las enfermedades que ya existen y a las nuevas enfermedades emergentes. El grupo celebrará una reunión en San Petersburgo del 15 al 17 de julio. Tal y como declaró Martin Rees, presidente de la Royal Society del Reino Unido y uno de los signatarios del informe: "Existe una necesidad acuciante de supervisión y planificación internacional muy bien coordinada que permita hacer frente a la amenaza de una pandemia por gripe. Además es absolutamente crucial que la comunidad internacional no olvide que en la actualidad no es precisamente la gripe aviar la enfermedad que más preocupación despierta entre la población. Son otras enfermedades emergentes y otras enfermedades infecciosas ya conocidas como la tuberculosis, el VIH/SIDA y la malaria las que están causando padecimientos a un mayor número de personas así como un importante daño económico a los países en vías de desarrollo. Enfermedades como la tuberculosis, la malaria y el VIH/SIDA representan ya en este momento una enorme carga para los países afectados. Resulta irónico comprobar que los países más afectados son también por lo general aquellos que cuentan con menos medios para enfrentarse al problema, lo que conlleva una doble carga económica para estos países. En palabras del Dr. Rees, "la lucha que mantenemos en estos momentos contra la gripe aviar resulta fundamental y esperemos que actúe además como catalizador que permita mejorar la planificación, seguimiento y respuesta a la amenaza que representan las otras enfermedades emergentes y las enfermedades que vuelven a aparecer. Muchas de las cuestiones relacionadas con la gripe aviar, como por ejemplo un mejor seguimiento de las fuentes a partir de las cuales se desarrollan las enfermedades en animales y seres humanos, la identificación de las zonas donde se detecta una mayor incidencia de las enfermedades humanas y la planificación de la producción y distribución de las vacunas adecuadas en caso de pandemia son también aplicables a otras enfermedades". "Quisiéramos instar a los gobiernos a que consideren la disparidad existente en esta materia entre países desarrollados y en vías de desarrollo para que adapten en consecuencia los necesarios sistemas internacionales de seguimiento y garanticen su capacidad de hacer frente a las actuales y futuras amenazas al tiempo que mantienen un crecimiento económico y un desarrollo sostenible", dijo asimismo. Los signatarios presentaron seis recomendaciones para hacer frente a la gripe aviar: - Prestar apoyo a las iniciativas internacionales establecidas en materia de gripe aviar por la Organización Mundial de la Salud, la Organización Mundial de Sanidad Animal, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación y el Banco Mundial. Cada Estado deberá por su parte prestar una especial atención a estas iniciativas a la hora de organizar sus propias estrategias. - Aportar la ayuda necesaria a las naciones en vías de desarrollo para que pongan en marcha sus propias estrategias e infraestructuras que les permitan combatir la gripe aviar y otras enfermedades, en especial en lo que se refiere a su detección y seguimiento, pues muchos países carecen simplemente de los fondos o de la capacidad para llevar a cabo las acciones necesarias. - Los gobiernos del G8 deberían procurase asesoramiento independiente en lo que respecta a sus estrategias globales de supervisión. - Asignar recursos para el desarrollo de nuevos tipos de vacunas y explorar las posibles conexiones en la transmisión de enfermedades de animales a seres humanos. - Los Estados deberán colaborar e intercambiar información sobre posibles brotes de la enfermedad y desarrollar una estrategia que les permita realizar esta tarea de manera eficaz. - Todas las estrategias para hacer frente a la gripe aviar son asimismo pertinentes y aplicables a otras enfermedades infecciosas. Los recursos dedicados a la gripe aviar deberían servir de complemento y no entrar en competencia con los fondos que ya están dedicados a luchar contra enfermedades como el VIH/SIDA, la tuberculosis, la malaria y el ébola. Los signatarios representan a las academias nacionales de ciencia de Brasil, Canadá, Francia, Alemania, India, Italia, Japón, Rusia, Sudáfrica, Reino Unido y Estados Unidos.
Países
Brasil, Canadá, China, Alemania, Francia, India, Italia, Japón, Rusia, Reino Unido, Estados Unidos, Sudáfrica