Regulación automática de la temperatura sin aporte de energía
Para la calefacción y la refrigeración de hogares y oficinas normalmente se necesita electricidad y, en la mayoría de los casos, esta se obtiene de la combustión de recursos energéticos fósiles. Los mismo ocurre con la refrigeración y el almacenamiento en frío de alimentos. Una clase de materiales capaces de absorber el calor cuando la temperatura aumenta y de liberarlo cuando desciende (los denominados materiales de cambio de fase, MCF) podrían ser el medio perfecto para mantener una temperatura deseada constante sirviéndose sencillamente de las propiedades de absorción del calor de los materiales elegidos sin un aporte o control energético externo. Aunque las aplicaciones son prácticamente ilimitadas, el aprovechamiento comercial de estos materiales ha sido mínimo debido a los elevados costes de producción y de encapsulamiento. Además, ha habido una carencia de pruebas de resistencia mecánica de los productos de MCF microencapsulados comerciales. Para dar solución a estos problemas, los investigadores europeos iniciaron el proyecto Effibuildings («Almacenamiento de energía térmica con materiales de cambio de fase para la eficiencia energética del parque europeo de edificios») con el propósito de desarrollar una nueva tecnología de producción a partir del uso de productos de desecho, métodos de encapsulamiento innovadores y nuevas técnicas de ensayo. En el marco del proyecto Effibuildings se han puesto en marcha investigaciones relacionadas con el uso de los MCF en almacenes refrigerados y congeladores industriales, así como en la impregnación al vacío de MCF en productos naturales porosos para su utilización en materiales de construcción, como el hormigón y la madera. Se realizó además un trabajo de modelado por ordenador para evaluar el uso de los MCF en la regulación de la temperatura del agua en piscinas al aire libre. Asimismo, se elaboraron dos nuevos sistemas de pruebas diseñados para evaluar la eficacia térmica de los materiales compuestos. Las iniciativas continuas que se llevan a cabo en este campo de investigación deberían tener una repercusión importante sobre la comercialización de los componentes basados en MCF para la regulación de la temperatura en una extensa variedad de aplicaciones.
