Valores que afectan a la interacción entre mayorías y minorías
El proyecto WAVE («Bienestar y valores en Europa: transiciones relacionadas con la religión, las minorías y el género») planteó un enfoque novedoso para estudiar la dinámica de las complejas relaciones entre grupos religiosos, minorías y sexos que influyen en el cambio social y la cohesión en una Europa cada vez más poblada y diversa. En el punto de confluencia de estas tres esferas se encuentran algunos de los cambios más importantes que están experimentando los sistemas de valores. WAVE partió del supuesto de que las «identidades culturales» y los «valores» pertenecen a un conjunto de conceptos intangibles que se entienden mejor estudiando sus formas de expresión y desarrollo en la práctica. Así, los socios de este proyecto financiado por la Unión Europea investigaron la interacción de diversos sistemas de valores en el contexto del bienestar social; las demandas y las prestaciones en materia de bienestar social son los marcadores fundamentales de los valores de una comunidad dada. A partir de dicho análisis surge la pregunta de si los valores basados en la religión influyen en los conflictos o la cohesión entre las mayorías y las minorías en toda Europa y, en caso de que la respuesta sea afirmativa, en qué medida lo hacen. Los resultados de la investigación de WAVE hacen pensar que la mayoría de las interacciones mayoría-minoría en el ámbito de la asistencia social se encuentran en una zona gris, a medio camino entre el conflicto y la cohesión. Los factores vinculados a los recursos, que incluyen el dinero, el espacio y el tiempo, influyen en la interacción mayoría-minoría; otros factores más cotidianos son los medios de comunicación, las políticas de inmigración y empleo o el papel de los encargados de gestionar las políticas de bienestar social. Los socios del proyecto descubrieron también las diferentes dimensiones de conflicto o tensión y de cohesión. En el primer caso, puede haber diferencias entre los grupos minoritarios o entre las diferentes generaciones de los mismos grupos. Además, los socios de WAVE quisieron profundizar en las nociones mismas de conflicto y cohesión, tratando de identificar las complejas relaciones entre ambas. A modo de ejemplo, el conflicto puede constituir un paso en el camino hacia la cohesión a más largo plazo. Así, a través de informes sobre estudios de casos, los miembros del consorcio consiguieron formular indicaciones sobre las situaciones en las que los valores basados en la religión pueden llevar a la solidaridad o a la tensión, y descubrieron que muchas veces se trata simplemente de un conflicto de intereses en vez de un conflicto de valores. Otras conclusiones importantes ponen en evidencia la ambigüedad que existe respecto al binomio preservación de la diversidad/promoción de la integración. Parece que sólo una tenue línea divisoria las separa; y en lo que respecta a la apertura a lo diferente, la presión para ajustarse al statu quo nacional parece existir incluso en los contextos más «progresistas». En relación con esta ambigüedad, los investigadores ofrecen pistas sobre si la función que cumplen las redes de las minorías es de integración o de segregación. Los miembros del consorcio elaboraron una lista de recomendaciones políticas aplicables a nivel local, nacional y europeo y entablaron relaciones con partes interesadas para intercambiar puntos de vista e informarles sobre las actividades y resultados del proyecto. Los socios de WAVE también celebraron un congreso internacional de clausura del proyecto, que contribuyó a cumplir los objetivos relacionados con la difusión de sus resultados. Estos tienen el potencial de promover un nuevo planteamiento de los estudios sobre las minorías, la dinámica de las relaciones entre mayorías y minorías, y las demandas y las prestaciones en materia de asistencia social en una Europa en crecimiento.
