Cambio global y especies de litoral rocoso
La biodiversidad marina de Europa constituye un recurso de gran valor y a la vez frágil que posee una importancia fundamental para la economía y la cultura de las poblaciones locales. Las zonas litorales son especialmente vulnerables, al albergar ecosistemas que se encuentran entre los más biodiversos y productivos del mundo. El proyecto MAREA se estableció con el fin de obtener una comprensión más profunda de la amenaza que pesa sobre el litoral rocoso característico del noroeste del Mar Mediterráneo. Se trata de una región en la que habitan especies longevas y sésiles especialmente vulnerables al cambio climático. Los socios del proyecto analizaron los efectos a largo plazo sobre los ecosistemas marinos con el fin de determinar los patrones globales que conducen al deterioro ecosistémico. Para conseguirlo se centraron en las reacciones tanto de comunidades de organismos como de especies concretas ante perturbaciones a gran escala del tipo de las provocadas por el cambio climático. Los investigadores realizaron estudios sobre el terreno para recabar importantes datos relativos a la temperatura y las dinámicas de las poblaciones. Empleando imágenes fotográficas, estadística, datos de sistemas de información geográfica y marcadores moleculares, determinaron el efecto de las actividades humanas en el ambiente marino. Los datos y conocimientos científicos generados por esta iniciativa facilitarán la previsión de los cambios provocados por el calentamiento global y también el diseño, por parte de las autoridades, de mejores estrategias orientadas a la conservación de la naturaleza. MAREA ha permitido una comprensión más profunda de la pérdida de hábitat y especies que facilitará el análisis y la gestión del deterioro de los ecosistemas marinos.