Interrogantes respecto a la infección tuberculosa latente
A pesar que en torno al 90 % de las personas que contraen la tuberculosis (TB) no llegan a desarrollarla, la progresión de infección a enfermedad no es un proceso homogéneo. En cerca del 50 % de los infectados en los que se manifiesta la enfermedad, ésta presenta una rápida progresión, y se diagnostica dentro de los dos años siguientes a la infección. La otra mitad desarrolla la enfermedad más tarde, esto es, sufre lo que suele denominarse una tuberculosis postprimaria o «de reactivación». La inmunización mediante la vacuna del Bacilo Calmette-Guerin (BCG) sintetizada a partir del virus Mycobacterium bovis resulta efectiva para prevenir la tuberculosis infantil, pero es poco eficaz para proteger a los jóvenes y los adultos de la enfermedad. Por consiguiente, las personas infectadas están expuestas de por vida al riesgo de reactivación, máxime si sus sistemas inmunológicos se encuentran debilitados, como es el caso de los enfermos de VIH. El proyecto HOMITB («Disección molecular del anfitrión y la bacteria en la patogenia y la inmunidad de la tuberculosis») se ha propuesto desentrañar las interacciones entre las células del anfitrión y las de las micobacterias. Dado que dichas interacciones pueden ser las causantes de la infección, el estudio también contempla el control de las mismas mediante la respuesta inmune celular. Se están llevando a cabo estudios de todo el genoma y de segmentos específicos del mismo a fin de identificar los genes que intervienen en el control inmunológico o el desarrollo de la infección primaria por Mycobacterium tuberculosis en niños y la tuberculosis pulmonar postprimaria en adultos. Asimismo, HOMITB estudia en humanos y ratones la función de las moléculas de señalización intracelular en la respuesta inmunológica y los resultados de la infección micobacteriana.