La respuesta de los linfocitos T cooperadores ayuda a desarrollar vacunas contra la peste porcina
La peste porcina clásica (PPC) es una enfermedad viral infecciosa de gran importancia económica y que afecta a cerdos y jabalíes. Los animales infectados desarrollan una leucopenia grave e inmunosupresión acompañadas de lesiones hemorrágicas y hasta nueve de cada diez cerdos jóvenes pueden morir como resultado de la infección. Las consecuencias sociales y económicas de las matanzas masivas en que desembocan los brotes de peste porcina clásica han llevado a los centros de investigación y las autoridades a reconsiderar la aplicación de vacunas de emergencia. Por consiguiente, existe un gran interés en el desarrollo y utilización de vacunas marcadoras para el control de la PPC en cerdos y jabalíes. Los socios del proyecto del Instituto Federal Alemán de Investigación para la Salud Animal, Friedrich-Loeffler Institut, reestimularon células mononucleares de sangre periférica (CMSP) aisladas de cerdos miniatura infectados con el virus. Estos ensayos facilitaron datos valiosos sobre la respuesta inmune de los linfocitos T. Los científicos utilizan dos tipos de péptidos: péptidos sintéticos previamente identificados como posibles epítopos de los linfocitos T y péptidos de la región proteica no estructural del virus. Se descubrió que los diferentes péptidos estimulaban diversas proporciones de linfocitos T cooperadores («T helper») o Th, conocidos como células CD4+ y de linfocitos Tcitotóxicos maduros o CD8+. Por ejemplo, un péptido indujo una respuesta casi exclusiva de los linfocitos T CD8+. Para introducir una nueva subdivisión en las respuestas de las células T inducidas por péptidos en linfocitos productores de citoquinas colaboradoras para la activación de macrófagos o Th1 y citoquinas colaboradoras para la generación de anticuerpos o Th2, se utilizaron ensayos inmunoaborbentes ligados a enzimas específicos para la detección de células productoras de citoquinas denominados ELISPOT. El equipo no encontró relación alguna entre el tipo de célula estimulada por el péptido y la fracción final de células productoras de interferón gamma (IFN-γ) o interleucina-4 (IL-4). Se encontraron prácticamente todas las combinaciones posibles, desde casi exclusivamente células productoras de IFN-γ hasta distintas mezclas de linfocitos T productores de IFN-γ e IL-4. Las diferencias en la respuesta de las citoquinas como resultado de la estimulación con antígenos se puede aplicar a la hora de desarrollar nuevas vacunas eficaces. Además, los datos sobre los diferentes péptidos pueden servir de base para vacunas multipeptídicas como una estrategia para aumentar la amplitud de la respuesta inducida por la vacuna.