Promover la conservación de las poblaciones de focas en Finlandia
Las focas son predadores oportunistas que se alimentan de pescado, moluscos y crustáceos. Algunas focas, como la monje, se encuentran amenazadas y otras, como la gris, están protegidas por leyes medioambientales. La conservación de las poblaciones de focas está ligada al estado de su hábitat natural pero también a la competencia con la que se encuentra a la hora de buscar alimento. Esta investigación se centró en la conservación de las poblaciones de foca gris en una zona costera de Finlandia. Encontrar una solución al conflicto de intereses que existe entre la industria pesquera y los conservacionistas fue el objetivo principal del equipo. Dicha solución implicaba un progreso en el plan de acción regional, cuya implementación requiere la participación activa de todas las partes interesadas. El proyecto FRAP trabajó en la construcción de un marco en el que realizar evaluaciones ecológicas y socioeconómicas de los efectos tanto positivos como negativos producidos la interacción entre las industrias pesqueras y la conservación de los vertebrados ictiófagos. Esta investigación ha permitido crear estrategias de compensación eficientes además de ecológicas.