En busca de predicciones climáticas más precisas
Climatólogos europeos han realizado contribuciones importantes para apoyar a organismos como el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático e instrumentos como el Protocolo de Kyoto. El proyecto CRYOSAT, en el que participan 11 socios de toda Europa, Estados Unidos y Australia, es un ejemplo excelente. El interés se centró en la criosfera y en determinar las concentraciones atmosféricas del pasado de gases trazadores relevantes para el cambio climático y la capa de ozono estratosférica. La Universidad de Reading, socio de CRYOSAT, colaboró estrechamente con otras organizaciones para abordar inconsistencias en los cálculos del potencial de calentamiento global que tienen los compuestos de fluorocarbonos. En concreto, se intentó cuantificar las eficiencias radiactivas expresadas en unidades de vatios por metro cuadrado por parte por mil millones por volumen. Se hizo hincapié en las especies emitidas a partir de fuentes antropogénicas, incluyendo refrigerantes como HFC134a, HFC23 y otros. Se usaron tanto mediciones en laboratorios como modelos para llegar a un consenso sobre la eficiencia radiactiva y barras de errores asociadas para varios compuestos de fluorocarbonos. Se identificaron desviaciones dignas de mención de cálculos anteriores y se rectificaron durante el proyecto. Los resultados del proyecto CRYOSAT, que han sido publicados en revistas científicas, podrían ayudar a inspirar mayor confianza en las predicciones del estado del clima en el futuro.