Estudio del nivel de los lagos para descubrir las variaciones climáticas del pasado
La investigación realizada en lagos y turberas de Europa ha proporcionado información de primera mano sobre los cambios repentinos sufridos por el clima en los últimos 6.000 años. Los nuevos datos se usaron para desarrollar modelos climáticos mejorados y sirven de referencia para las políticas de la UE. El proyecto ACCROTELM recopiló resultados de dataciones por radiocarbono, análisis de los anillos de los árboles y muestras de sedimentos de lagos en las montañas del Jura, los Prealpes franceses y la meseta suiza. Esta información se usó para crear un registro histórico de los niveles de agua en lagos europeos. Los resultados reflejaron un clima inestable intercalado con periodos de aumento de los niveles de los lagos. Los datos también mostraron que la actividad solar desempeñó un papel importante en los cambios climáticos en la zona del Atlántico Norte. Los estudios realizados en los registros de los glaciares en los Alpes suizos demostraron unas fluctuaciones que se correspondían con variaciones en los niveles de los lagos. Se llevó a cabo un análisis detallado del lago Joux en las montañas del Jura, que dio como resultado una visión exhaustiva de los cambios medioambientales relacionados con el nivel de los lagos y la cubierta de vegetación en los últimos mil años. También se estudiaron muestras de sedimentos del lago Joux, lo que deparó un análisis detallado de la transición desde el periodo cálido medieval (PCM), un periodo inusualmente cálido en la región del Atlántico Norte. A este periodo le siguió el periodo de enfriamiento conocido como la Pequeña Edad de Hielo (PEH). Los resultados correspondientes a la última etapa del PCM muestran unos niveles de los lagos bajos en comparación con los de la PEH, donde se observan niveles superiores. Se compararon los resultados con datos por radiocarbono para conseguir información sobre las variaciones de la actividad solar en el pasado. Los resultados mostraron que los niveles mínimos de la actividad solar se correspondían con unos niveles de lagos superiores.
