Impresión 3D y terapia génica para tratar las lesiones condrales
El cartílago, el tejido que recubre la superficie de las articulaciones sinoviales de tobillos, codos, caderas y rodillas, se desgasta con la edad. A diferencia del hueso, el cartílago no tiene capacidad de autorreparación. «Una de sus principales manifestaciones del envejecimiento es la aparición de artrosis —comenta el coordinador del proyecto ReCaP, Fergal O'Brien, del Real Colegio de Cirujanos de Irlanda —. Los cirujanos pueden intervenir y llevar a cabo un lavado articular, pero el resultado final suele conllevar una prótesis de cadera o rodilla».
Nuevos métodos para tratar las lesiones condrales
En el proyecto ReCaP, que contó con el apoyo del Consejo Europeo de Investigación (CEI), se pretendía concebir nuevos métodos para tratar la lesiones condrales, también conocidas como lesiones de cartílago articular. La iniciativa se basó en trabajos previos para desarrollar biomateriales que favorecieran la regeneración del tejido cartilaginoso. «Desarrollamos un biomaterial que imita la estructura del cartílago natural —agrega O'Brien—. Lo hicimos combinando colágeno, una proteína presente en muchos tejidos, con otras sustancias que se encuentran en el cartílago. Cuando se implanta en pequeñas lesiones del cartílago articular, el biomaterial actúa como una esponja, absorbiendo células y dirigiéndolas a reparar el tejido dañado». Si bien esta solución podría funcionar en el caso de lesiones reducidas, resultó insuficiente para tratar lesiones condrales mayores. Aquí es donde entra en escena ReCaP. «En este proyecto mejoramos la matriz mediante la impresión 3D de un polímero sintético mecánicamente sólido —explica O'Brien—. A continuación, se impregnó con un polímero natural más blando, para que la matriz conservara su funcionalidad biológica». Después, el equipo del proyecto aplicó terapia génica. Las nanopartículas son absorbidas por las células, que activan o desactivan determinados genes. «Por ejemplo, se activan genes que pueden ayudar a producir nueva matriz cartilaginosa, mientras que se desactivan genes asociados a la inflamación», observa O'Brien.
Biomaterial para la reparación de tejidos
El equipo del proyecto desarrolló un biomaterial para la reparación de tejidos que administra un gen terapéutico. Este planteamiento se probó en animales como cabras y, en la actualidad, los artículos con los resultados de este procedimiento están en proceso de revisión. Además, algunos aspectos de la tecnología forman parte de una solicitud para proteger la propiedad intelectual asociada. «Hace poco hemos conseguido financiación adicional, lo que nos posibilitará seguir examinando el potencial comercial de la plataforma —comenta O'Brien—. En este proyecto tuvimos la gran suerte de contar con el apoyo del CEI, que respalda investigaciones muy rentables, pero de alto riesgo». Entre las posibles opciones que se están analizando figuran la asociación con una multinacional o la creación de una empresa emergente.
Tratar las lesiones medulares en una fase tempana
O'Brien y su equipo también están estudiando la aplicación de sus hallazgos a otros tejidos. Por ejemplo, poder tratar lesiones medulares en una fase temprana podría tener una gran repercusión en la vida de las personas. «Nuestra idea es añadir un elemento eléctricamente activo a nuestro material impreso en 3D y administrar terapias génicas alternativas ——explica O'Brien—. Este material portaría el gen terapéutico para activar o desactivar ciertas células, pero también proporcionaría estimulación eléctrica, lo cual podría dar lugar a todo un nuevo paradigma de posibles aplicaciones». La Irish Rugby Football Union Charitable Trust y el AMBER Centre financian esta investigación, y varios exjugadores lesionados colaboran con O'Brien y su equipo en ella. Uniones deportivas de todo el mundo han empezado a mostrar interés. «Uno de los jugadores está escribiendo un libro sobre sus vivencias con las lesiones y su participación en esta investigación», señala O'Brien.
Palabras clave
ReCaP, cartílago, impresión 3D, terapia génica, implantes, inflamación, artrosis