Hacia una producción circular de suelos laminados
En una planta de prueba de Bazeilles (Francia) se está utilizando el proceso de explosión por vapor para reciclar suelos laminados y sus componentes primarios: tableros de fibra de densidad media (MDF, por sus siglas en inglés) y alta (HDF, por sus siglas en inglés). La planta, propiedad del fabricante líder de suelos laminados Unilin, demuestra la gran capacidad de la tecnología desarrollada, que permite extraer y reutilizar las fibras sin afectar de forma notable a su calidad y que el reciclado aporte beneficios económicos. El sector del revestimiento para suelos está lejos de ser sostenible, ya que hoy día solo se recicla un pequeño porcentaje de sus residuos. Los suelos laminados y todos los productos de MDF y HDF se consideran no reciclables por lo que, al final de su vida útil, suelen acabar en vertederos o incinerados. Unilin y sus diecinueve socios en el proyecto CISUFLO, financiado con fondos europeos, se proponen cambiar esta situación. Para ello, trabajan en el desarrollo de nuevas tecnologías y productos que no solo mejoren la recuperación de materiales, sino que además sean aptos para una economía circular.
¿De qué está hecho un suelo laminado?
Tal y como se describe en el Informe anual 2023-2024 de la Federación Europea de Paneles de Madera (Bélgica), entidad socia del proyecto CISUFLO, los suelos laminados se componen normalmente de un sustrato de HDF, una superficie decorativa y una capa de desgaste. «En la cara inferior, hay una capa de equilibrio, con capas superior e inferior hechas de papel impregnado con resinas termoendurecibles aminoplásticas», se lee en el informe, que prosigue explicando que el componente principal del suelo laminado son HDF, que constituyen su núcleo. «La reciclabilidad del material laminado se basa en su facilidad de desmontaje y retirada. En la actualidad, los suelos laminados presentan un potencial de reciclabilidad prometedor, dado que están compuestos en un 85 % por tableros de fibra, hechos con fibras adheridas al núcleo del material y envueltas con papeles decorativos impregnados».
La tecnología de reciclado
La tecnología de Unilin, desarrollada para cerrar el círculo del reciclaje, se basa en un proceso termomecánico denominado «explosión por vapor», que permite extraer fibras de madera valiosas de productos, en concreto de suelos laminados, que contienen MDF o HDF. A continuación, las fibras se preparan para su reutilización y se utilizan como sustituto de las fibras vírgenes en un proceso de producción de HDF. La línea de prueba de Unilin en su fábrica de MDF en Francia produce más de 1 tonelada de fibras recicladas por hora. Las fibras se utilizan inmediatamente para fabricar nuevos productos de MDF y HDF. La planta, con un tamaño relativamente pequeño, destaca las ventajas de la tecnología, a saber: las fibras se pueden extraer y reutilizar sin que ello afecte de forma notable a la calidad, el reciclado aporta beneficios económicos y el proceso es energéticamente más eficiente que la producción de fibras a partir de madera virgen. En un comunicado de prensa publicado en el sitio web de la Federación Europea de Paneles de Madera se afirma: «Este logro refuta la imagen que a veces se tiene de MDF o HDF como un producto no reciclable, ya que demuestra su circularidad, por la que son conocidos los paneles de madera europeos». El proyecto CISUFLO (CIrcular SUstainable FLOor coverings) finaliza en 2025. Para más información, consulte: Sitio web del proyecto CISUFLO
Palabras clave
CISUFLO, revestimiento para suelos, laminado, suelo, fibra, tablero de fibra, tablero de fibra de alta densidad, tablero de fibra de densidad media, MDF