Un sistema energético ecológico, eficiente y asequible adaptado al futuro
A medida que la sociedad continúa la transición de lo analógico a lo digital, la organización y el uso de los datos se vuelven más sencillos, lo que hace que nuestro sistema energético esté más conectado y sea más inteligente, eficiente, fiable y sostenible. El uso de tecnologías digitales como la inteligencia artificial, la computación en nube, la cadena de bloques y el internet de las cosas (IdC) mejorará la forma en que utilizamos la energía y ayudará a encontrar formas de descarbonizar nuestros sistemas energéticos. La digitalización contribuirá a las iniciativas políticas europeas del Pacto Verde Europeo y Una Europa Adaptada a la Era Digital y apoyará los objetivos de la Unión de la Energía al fomentar la conectividad, la operatividad y el uso de las energías renovables. El objetivo es lograr energía sostenible, competitiva y asequible, así como la independencia y seguridad energéticas, que cumpla los objetivos energéticos y climáticos de la UE para 2030 y 2050 en aras de una economía hipocarbónica. La necesidad de contar con mercados eléctricos más flexibles para adaptar la demanda a la oferta de las renovables, que suele ser episódica e impredecible, crece a medida que estas energías constituyen una parte mayor del suministro energético europeo. Además, las redes eléctricas modernas están dejando de depender de los gestores de redes de transporte centralizados y con un gran número de infraestructuras en favor de los gestores de redes de distribución (GRD) flexibles y con una mayor capacidad para gestionar diversas fuentes de energía renovables. Todo ello requerirá una infraestructura adaptada al futuro, con normas comunes, redes gigabit y nubes seguras tanto de la generación actual como de la venidera. Estas infraestructuras permitirán a los consumidores participar en la transición energética de una forma nueva, al tiempo que se benefician de mejores servicios basados en innovaciones digitales y ahorran energía. La digitalización, por tanto, es una herramienta esencial para lograr la transformación del sistema energético. Permite un equilibrado más eficiente de la carga, facilita unos mercados dinámicos que proporcionan un suministro más seguro y diversificado, mejora la eficiencia energética y reduce las emisiones de gases de efecto invernadero al aumentar la adopción de las energías renovables. Los resultados capacitarán a los consumidores y harán posible la aparición de prosumidores y la adopción de tecnologías de vanguardia. El uso de la digitalización para facilitar el cambio hacia soluciones más descentralizadas y variables, como las redes inteligentes, también alterará la producción, distribución y consumo convencionales de energía. Este nuevo Results Pack de CORDIS se centra en quince proyectos de investigación de Horizonte que demuestran el compromiso de la UE con un sistema energético digitalizado, ecológico y resiliente. Entre los principales temas que se tratan figuran el desarrollo de una infraestructura de intercambio de datos a escala europea para los nuevos servicios energéticos, la capacitación de los consumidores mediante un mayor control de su consumo de energía y sus facturas a través de nuevas herramientas de participación digital. En la investigación también se aborda el aumento de la adopción de nuevas herramientas digitales para el sistema energético y el refuerzo de la ciberseguridad y la resiliencia en todo el sistema energético para cumplir los requisitos al instante. En el proyecto EdgeFLEX se desarrolló una interfaz de programación de aplicaciones 5G para que los proveedores de energía conecten y gestionen dispositivos sobre el terreno, mientras que en PARITY se creó una plataforma de mercado de flexibilidad local que integra el IdC y las tecnologías de la cadena de bloques. El equipo de X-FLEX ha desarrollado soluciones para optimizar los activos energéticos flexibles descentralizados. En el proyecto ebalance-plus se aumentará la flexibilidad energética de las redes de distribución. En OneNet se permite que el sistema eléctrico europeo funcione como una sola red, al facilitar la participación de las partes interesadas a todos los niveles, desde el pequeño consumidor hasta los grandes productores. El equipo de INTERCONNECT llevó a cabo pruebas reales de soluciones avanzadas para conectar casas y edificios inteligentes a la red eléctrica. En PlatOne se utilizó la tecnología de la cadena de bloques para satisfacer las necesidades de los GRD modernos, incluida la gestión de datos. El equipo de FLEXIGRID construyó una arquitectura integrada para equilibrar la oferta y la demanda de energía. En SMART4RES se crearon herramientas de nueva generación para mejorar el rendimiento de las previsiones de las energías renovables. La calefacción y refrigeración de edificios representa aproximadamente la mitad del consumo energético de la UE. Para ayudar a que los hogares y las oficinas sean más eficientes desde el punto de vista energético, el equipo de PHOENIX utilizó tecnologías de IA y computación en nube para transformar los edificios existentes en edificios inteligentes, mientras que el del proyecto doMos desarrolló un ecosistema integrado de gestión energética para edificios inteligentes. BRIGHT permitió a las comunidades asumir el control total de sus sistemas energéticos locales, mientras que en REDREAM se construyó una plataforma para ayudar a los consumidores y prosumidores a aprovechar las ventajas del consumo flexible de energía a la carta utilizando servicios en la nube e IA. El equipo de MATRYCS ha desarrollado una nueva tecnología de toma de decisiones y análisis de datos para edificios eficientes desde el punto de vista energético. Por último, en EUniversal se creó una interfaz universal comercial para fomentar la interoperabilidad en toda Europa en pro de un suministro eléctrico sostenible, seguro y estable.