Nuevas herramientas que ofrecen una visión imparcial de las influencias antropogénicas y naturales desvelan nuestra realidad climática
Durante millones de años, la Tierra ha mantenido un sistema climático equilibrado, al gestionar hábilmente las emisiones naturales procedentes de la absorción por las plantas y la descomposición de la materia orgánica, así como de acontecimientos como las erupciones volcánicas. Las actividades humanas recientes han inclinado la balanza. La quema de combustibles fósiles como el carbón, el gas y el petróleo y diversos procesos industriales han añadido una importante carga a nuestra atmósfera. Distinguir entre las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) antropogénicas y las naturales es crucial para actuar con eficacia contra el cambio climático. A pesar de los numerosos esfuerzos realizados por los Gobiernos nacionales, las autoridades regionales y las partes interesadas del sector privado para reducir las emisiones de GEI, medir la eficacia de las políticas correspondientes sigue siendo un reto. «Los inventarios nacionales de GEI actuales informan cada año a la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, pero estos informes suelen estar plagados de importantes incertidumbres y no pueden verificarse con facilidad de forma independiente», afirma Philippe Peylin, coordinador del proyecto VERIFY, financiado con fondos europeos.
Emisiones de GEI naturales frente a las antropogénicas
En VERIFY, un esfuerzo de colaboración entre cuarenta socios, se pretendía proporcionar una evaluación más precisa de las reservas de carbono y las emisiones de GEI, incluidos el dióxido de carbono (CO2), el metano (CH4) y el óxido nitroso (N2O). «Crear una caracterización precisa de las variaciones espaciotemporales de los flujos de GEI es complejo: requiere distinguir entre los componentes antropogénicos y los naturales y sus correspondientes impulsores», afirma Peylin. El equipo abordó este reto mediante planteamientos de modelización avanzados. Su estrategia incluía el uso de mediciones atmosféricas de GEI, inversiones del transporte de trazadores y una amplia gama de observaciones terrestres, tanto «in situ» como desde el espacio. «Nuestro planteamiento no tiene precedentes, ya que incorpora observaciones independientes en apoyo de inventarios que se basan principalmente en datos estadísticos» —destaca Peylin—. La riqueza de conocimientos generada por VERIFY se aprovechará para mejorar los inventarios nacionales de GEI. En colaboración con los organismos nacionales encargados de los inventarios, esta información debería ayudar a seguir el progreso de los esfuerzos de mitigación de la Unión Europea (UE) hacia el cumplimiento de los objetivos establecidos en el Acuerdo de París».
Nuevos productos que filtran las incertidumbres y sesgos de los datos
Los miembros del proyecto han fomentado las sinergias entre las comunidades científica y de inventario mediante reuniones en red y contribuciones a programas internacionales. Han desarrollado simulaciones de modelos estadísticos y basados en procesos de los flujos de GEI de los ecosistemas terrestres en Europa, mediante la creación de mapas de CO2 de alta resolución en áreas que abarcan unos 11 km. El equipo de VERIFY también ha logrado elaborar mapas de alta resolución que abarcan zonas de unos 6 km para estudiar las correlaciones de emisión de CO2 entre los seres humanos y las especies coemisoras en toda Europa. Los investigadores también han creado un marco de inversión comunitaria para futuros sistemas de vigilancia de los GEI. «Otro logro importante ha sido la elaboración de un marco para proporcionar actualizaciones anuales de la síntesis de flujos de CO2, CH4 y N2O para todos los países de la UE. Los datos abarcan los últimos 20 años hasta 2022», señala Peylin. Además, se ha creado una base de datos para albergar conjuntos de datos de VERIFY y herramientas de visualización de fácil manejo para analizar las tendencias recientes de los flujos de GEI. Todos los productos desarrollados a lo largo de VERIFY pueden encontrarse aquí. «En VERIFY se ha logrado crear métodos científicamente sólidos para ayudar a evaluar la exactitud y los posibles sesgos de los inventarios nacionales de GEI notificados por diversas partes a través de marcos operativos independientes —concluye Peylin—. La idea básica ha sido ofrecer estimaciones basadas en diversas observaciones de emisiones y sumideros de GEI tanto naturales como antropogénicos, junto con sus incertidumbres conexas».
Palabras clave
VERIFY, antropogénico, marco, cambio climático, emisiones de GEI, CO2, CH4, N2O