Inteligencia colectiva para la transición en zonas con uso intensivo del carbón
El objetivo europeo de la transición hacia un sistema energético más sostenible exige establecimiento de redes de contactos, colaboración y concentración en una perspectiva común. El proyecto TRACER, financiado con fondos europeos, reunió a varias regiones europeas con uso intensivo del carbón para que diseñaran, o volvieran a diseñar, sus estrategias de investigación e innovación (I+i). El proyecto incluía nueve regiones europeas, seis de ellas en Estados miembros de la Unión Europea (Bulgaria, Chequia, Alemania, Grecia, Polonia y Rumanía) y tres en países de fuera de la Unión (Serbia, Ucrania y el Reino Unido). Además de ayudar a los agentes regionales a desarrollar estrategias de I+i para una especialización inteligente, TRACER se centró en facilitar la identificación y el intercambio de mejores prácticas, como hojas de ruta industriales del carbón hacia nuevas tecnologías y estrategias de transición para la producción combinada de calor y electricidad a base de carbón para la generación de electricidad y calefacción urbana con bajas emisiones de carbono. El equipo de TRACER también investigó los retos sociales pertinentes en las regiones destinatarias, incluidas las necesidades de reciclaje profesional de la mano de obra, al tiempo que orientaba a los agentes regionales sobre el acceso a los fondos y programas europeos disponibles y sobre la forma de obtener cofinanciación nacional pública y privada adicional.
El establecimiento de redes de contactos allana el camino para la transición a la energía verde
Los responsables políticos de las regiones destinatarias pasaron por un proceso de descubrimiento empresarial. «Debido a los efectos de la pandemia de COVID 19, las técnicas para llevar a cabo el proceso de participación de las partes interesadas tuvieron que cambiar —señala Rita Mergner, coordinadora del proyecto—. Sin embargo, hubo suficientes oportunidades para reunir a las partes interesadas y debatir sus puntos de vista sobre la perspectiva y las prioridades de la región». Este proceso ya está en marcha en todas las regiones, y muchas partes interesadas ya han participado. Además, el trabajo sobre las mejores prácticas relacionadas con la transición hacia un sistema energético más sostenible podría utilizarse en los debates con las partes interesadas de las regiones socias y en un ámbito más amplio.
En busca de tecnologías energéticas innovadoras
En TRACER se exploró una serie de potenciales ofrecidos por los emplazamientos posmineros a gran escala, incluido el desarrollo de energía eólica (el Reino Unido, Gales), fotovoltaica (Bulgaria, Chequia, Alemania, Lusacia, Grecia-Macedonia Occidental, Polonia, Serbia) y energía solar de concentración (Grecia). Estos emplazamientos también ofrecen oportunidades para probar sistemas innovadores de uso de la tierra, como la agrosilvicultura o los montes bajos de rotación corta para el uso de materiales avanzados y la producción de biocombustibles (Chequia, Grecia, Lusacia, Polonia, Serbia). Otros ámbitos con potencial son la energía geotérmica (Chequia), la calefacción urbana mediante biomasa o bombas de calor (Chequia, Valle de Jiu-Rumanía Occidental, Gales) y los planteamientos innovadores del turismo en antiguos emplazamientos industriales (Reino Unido-Gales) y la reconversión/regeneración urbana (Valle de Jiu-Rumanía Occidental). Los propios socios del proyecto han adquirido conocimientos sobre la preparación y aplicación del enfoque de especialización inteligente. Los viajes de estudios realizados a Finsterwalde (Alemania), Gales (el Reino Unido) y el Valle de Jiu (Rumanía) brindaron grandes oportunidades de aprendizaje a las partes interesadas. En Gales se compartió la experiencia de mejores prácticas de los proyectos financiados con fondos europeos FLEXIS y SPECIFIC. Se está cooperando con otros proyectos financiados con fondos europeos, como ENTRANCES, DE-Carb y la plataforma Initiative for coal regions in transition.
Un mecanismo de apoyo a las políticas energéticas en curso
Las estrategias y hojas de ruta elaboradas a partir de los debates mantenidos en el contexto de TRACER deberían contribuir, a largo plazo, a estimular la inversión en el sector de la energía hipocarbónica. «En el siguiente paso, los socios del proyecto se basarán en los resultados de TRACER y continuarán su trabajo sobre la transición energética justa. Hay nuevos proyectos de cooperación en marcha», concluye Mergner.
Palabras clave
TRACER, transición energética, regiones con uso intensivo del carbón, energía sostenible, estrategias de I+i, establecimiento de redes de contactos, mejores prácticas, energía verde