La resistencia de la bacteria hospitalaria se remonta a mediados del siglo XIX
Durante los últimos decenios, los enterococos se han convertido en una de las principales causas de infecciones intrahospitalarias. De estas bacterias, la «E. faecalis» es, en gran medida, responsable de las infecciones por enterococos en personas hospitalizadas y, además, es uno de los tipos de bacterias más resistentes a los antibióticos. Gracias al apoyo de los proyectos SCARABEE y SCIENTIA-FELLOWS II, financiados con fondos europeos, un equipo de investigación internacional ha descubierto las características de la «E. faecalis» que le han ayudado a sobrevivir a pesar de los avances modernos en el desarrollo de los antibióticos y el control de las infecciones en el ámbito de la atención sanitaria. Los hallazgos del equipo se publicaron en la revista «Nature Communications». La bacteria «E. faecalis», que suele encontrarse en el tracto digestivo y el intestino, puede causar una infección cuando ingresa a una herida, la sangre o la orina. Los pacientes hospitalizados tienen un mayor riesgo de infección debido a que poseen un sistema inmunitario debilitado. Las bacterias pueden ser responsables de síndromes como la septicemia e infecciones como la endocarditis y la meningitis por enterococos. Los investigadores estudiaron muestras de «E. faecalis» tomadas de una amplia variedad de especies hospedadoras, entre las que se incluyeron aves silvestres, mamíferos, personas sanas y pacientes hospitalizados, desde la época anterior a los antibióticos en 1936 hasta 2018. Se utilizaron técnicas de secuenciación de ADN de lectura corta y larga para secuenciar los genomas bacterianos. «Tuvimos una oportunidad única de estudiar muestras clínicas desde antes de la amplia introducción de los antibióticos», explica el coautor y catedrático Jukka Corander, en una nota de prensa publicada en el sitio web de la Universidad de Helsinki. «La muestra más antigua que analizamos fue tomada en un hospital neerlandés en 1936. Conocer el genoma exacto de estas bacterias antiguas nos dio la oportunidad de compararlas con muestras clínicas modernas y rastrear la evolución de la población bacteriana con una precisión increíble», continúa Corander, afiliado a la Universidad de Oslo y la Universidad de Helsinki.
Los linajes más antiguos de la «E. faecalis» nosocomial
El estudio informó sobre múltiples linajes intrahospitalarios de «E. faecalis» en todo el mundo. Sus últimos antepasados comunes se remontan a mediados del siglo XIX, mucho antes de la aparición de los entornos hospitalarios modernos. «No había antibióticos o soluciones antibacterianas similares disponibles en el siglo XIX como en los hospitales modernos. Y, sin embargo, algún tipo de presión selectiva llevó al nacimiento de estas cepas bacterianas. Gracias a las características agregadas a su genoma, las bacterias continúan sobreviviendo y diseminándose en los hospitales hasta el día de hoy», señala Corander. El equipo encontró genes en las muestras antiguas de «E. faecalis» que hacían que las bacterias fueran resistentes al arsénico y al mercurio, con lo que identificó a estos elementos como posibles presiones selectivas externas. De todas las muestras tomadas, las de las especies de aves silvestres fueron especialmente interesantes. «Encontramos cepas de “E. faecalis” en las heces de varias aves silvestres, similares a las cepas nosocomiales. Dado que la mayoría de las muestras se tomaron de especies de aves que no están en contacto estrecho con poblaciones humanas, podemos concluir que los rasgos que hacen que las cepas nosocomiales sean exitosas les dan la capacidad de vivir y propagarse también en las poblaciones de aves». El estudio destaca la importancia de controlar a los pacientes en los hospitales para detectar cepas de enterococos nosocomiales tan pronto como sea posible y prevenir su transmisión. SCARABEE (Scalable inference algorithms for Bayesian evolutionary epidemiology) y SCIENTIA-FELLOWS II (SCIENTIA-FELLOWS II: International Postdoctoral Fellowship Programme) son coordinados por la Universidad de Oslo. Finalizan en 2022 y 2024, respectivamente. Para más información, consulte: Proyecto SCARABEE Proyecto SCIENTIA-FELLOWS II
Palabras clave
SCARABEE, SCIENTIA-FELLOWS II, «Enterococcus faecalis», «E. faecalis», bacterias, hospital, infección