Una novedosa silla-exoesqueleto como apoyo para los trabajadores de fábricas
Los operarios de fábricas y otros sectores suelen trabajar muchas horas de pie, pero no pueden usar sillas de oficina estándar porque pueden ser obstáculos peligrosos tanto para ellos como para la maquinaria. Aunque trabajar ocasionalmente de pie es beneficioso para la salud, hacerlo durante turnos enteros tiene el efecto contrario. En concreto, puede provocar lesiones, diversos tipos de sobrecargas, como lumbalgia, e hipertensión. Además, los cambios demográficos y sociales hacen que una proporción cada vez mayor de los trabajadores de fábricas tenga una edad avanzada, en la que es especialmente inapropiado estar de pie todo el día. Para hacer frente a estos problemas, en el proyecto financiado con fondos europeos Chairless Chair, se desarrolló una silla-exoesqueleto. Los exoesqueletos industriales convencionales se llevan en la parte superior del cuerpo y aumentan la fuerza de los trabajadores. La Chairless Chair es la primera diseñada para colocarla en la parte inferior del cuerpo y soportar el peso de los trabajadores.
No limita la movilidad de los trabajadores
Al llevar la silla como si fuese una prenda, los trabajadores se mueven con normalidad, y soportan su peso con sus propias piernas. Cuando necesitan un descanso, el exoesqueleto puede soportar su peso sin interferir en su trabajo en la fábrica. La coordinadora del proyecto, Katrin Hoffmann, explica el producto: «La Chairless Chair puede llevarse durante toda la jornada laboral, ya que no interfiere al caminar o estar de pie. Se adapta a todos los movimientos y los trabajadores pueden pasar de estar de pie a sentarse o caminar en cuestión de segundos». La tecnología redirige el 64 % del peso corporal del usuario a través del exoesqueleto, lo cual alivia la tensión en la espalda y las articulaciones de los trabajadores y, así, ayuda a evitar lesiones y problemas de salud. Además, promueve el «sentarse activamente», que ayuda a fortalecer los músculos. «Consta de dos patas esqueléticas de plástico reforzado con fibra de vidrio y sus correspondientes articulaciones —añade Hoffmann—. En la parte superior tiene las superficies de asiento, y la correa que se sujeta a las caderas. Otros dos puntos de fijación son las correas en los muslos y las correderas en el calzado». La silla tiene pies de goma antideslizantes que proporcionan una base segura. También permite un ajuste continuo, lo que la hace adecuada para trabajadores de prácticamente cualquier altura o complexión. También incorpora un arnés de pecho opcional para mejorar la distribución del peso y la ergonomía.
Desarrollo y finalización del producto
La versión actual, la Chairless Chair 2.0, en realidad es la tercera generación de la silla. Se ha perfeccionado en colaboración con fabricantes de automóviles: se ha reducido el peso en más de un 25 %, se ha ampliado el ajuste de altura de 1,5 a 2 metros y se ha afinado su diseño. El producto se ha optimizado para un mejor ajuste. La versión más moderna es más segura y ofrece más libertad de movimiento. Los tirantes, el chaleco y las almohadillas del asiento se han rediseñado y se han confeccionado con materiales textiles nuevos. Estos cambios hacen que el producto sea más cómodo y duradero. El equipo ha afianzado la Chairless Chair como una marca conocida, especialmente entre los fabricantes de automóviles alemanes. Los investigadores seguirán perfeccionando el producto en versiones posteriores, al tiempo que buscarán nuevos mercados. El producto es bueno para los trabajadores de más edad, pero no está destinado exclusivamente a ellos. Es beneficioso para cualquier trabajador que tenga que estar de pie todo el día, ya que reduce las consecuencias para la salud y la pérdida de productividad derivadas al trabajar en esta posición.
Palabras clave
Chairless Chair, de pie, exoesqueleto, apoyo, trabajadores de fábrica, andar, sentarse activamente, dolor de espalda
