Dar vida a la historia europea con los datos masivos del pasado
Una identidad europea inclusiva se beneficia de un profundo compromiso con el pasado de la región. El proyecto Time Machine pretende lograrlo explotando las fuentes de datos masivos que ya son de acceso libre. El apoyo de la Unión Europea para una acción preparatoria permitió el desarrollo de un plan de acción que duró una década, a fin de digitalizar a gran escala kilómetros de archivos de grandes museos y colecciones de bibliotecas en sistemas de información distribuidos. La inteligencia artificial tendrá un papel clave en cada uno de los pasos, desde planificar la digitalización hasta interpretar documentos y verificar datos. Una vez integrada, esta infraestructura podría crear nuevos negocios y oportunidades de empleo en toda una serie de industrias, como las TIC, los sectores creativos y el turismo.
Construir un mundo en cuatro dimensiones
En los próximos tres años (2020-2023), el proyecto Time Machine desarrollará una plataforma que incluye un motor de búsqueda para acceder a información sobre personas y lugares del pasado. En 2018 el equipo puso a prueba un prototipo que permitió buscar un texto histórico manuscrito, plantear preguntas sobre material iconográfico y navegar temporalmente y de forma sencilla por mapas históricos. Actualmente, la digitalización se lleva a cabo a través de más de veinte «máquinas del tiempo locales», en ciudades como Ámsterdam, Budapest, Amberes y París. Aunque aún son incipientes, están formadas por una comunidad de investigadores, emprendedores y expertos patrimoniales. En la actualidad se está renovando la plataforma mediante la tecnología del Marco Internacional de Interoperabilidad de Imágenes (IIIF, por sus siglas en inglés), que es totalmente compatible con las normas de Europeana, un colaborador del proyecto. El proyecto Time Machine construirá un motor en cuatro dimensiones (tres dimensiones, además del tiempo) que «recree» las ciudades antiguas, un logro que depende de que la inteligencia artificial desbloquee las principales tecnologías de apoyo para los denominados «mundos espejo», gemelos digitales de nuestras ciudades en los que puede integrarse la información legible por una máquina. Se podrá acceder a los mismos desde los teléfonos móviles o a través de interfaces específicas de realidad aumentada. «En tanto que nuevas plataformas de información, es probable que los mundos espejo tengan un papel tan importante como actualmente tiene la web o las redes sociales. De aquí a diez años, nuestro objetivo es haber desarrollado el primer mundo espejo europeo en cuatro dimensiones», afirma Frédéric Kaplan, coordinador del proyecto. Al mismo tiempo, el proyecto Time Machine planea crear centros de digitalización para acelerar la transformación de activos públicos y privados, y archivos en recursos digitales accesibles. El plan de acción también tiene previsto desarrollar una flota de vehículos para acelerar los esfuerzos de digitalización.
Consolidar el conocimiento histórico
La inteligencia artificial y los datos masivos, cuando se combinan con los conocimientos humanos, ofrecen la posibilidad de replantear críticamente las interpretaciones históricas actuales. Por ejemplo, el año pasado, cuando se aplicó a varios cientos de miles de documentos de historia del arte un sistema de lectura de documentos basado en inteligencia artificial, se identificó más de mil obras de arte con atribuciones conflictivas. Kaplan recuerda: «Nadie lo sabía, ya que únicamente una máquina podría escanear sistemáticamente una cantidad tan grande de datos. Se pondrá en marcha una verificación a gran escala para millones de edificios europeos. Se trata del principio de una versión consolidada del conocimiento histórico». Actualmente, más de cuatrocientas instituciones contribuyen con el proyecto Time Machine. El plan de acción incluye el desarrollo de varias plataformas para becas, educación, bibliotecas, museos, archivos, sectores creativos, turismo, urbanismo y uso del suelo. Cada una de ellas se creó para casos de uso específicos con la colaboración de los organismos profesionales pertinentes. Ahora el equipo está acabando su plataforma para la publicación de la petición de comentarios (RFC), que será el pilar de su estrategia de diseño, inspirada en el diseño colectivo de internet. En marzo de 2020, la acción preparatoria publicará los resultados del trabajo realizado hasta la fecha, que incluirá su plan de sostenibilidad, ampliación y desarrollo, junto con la versión pública de la plataforma y la implantación de la infraestructura.
Palabras clave
Time Machine, patrimonio cultural, datos masivos, inteligencia artificial, digitalización, mundos espejo, cuatro dimensiones, realidad aumentada