La «Agenda Digital para Europa» prevé un aumento de la inversión en I+D
El 19 de mayo la Comisión Europea desveló una nueva iniciativa llamada «Agenda Digital para Europa». Entre los campos de actuación fijados en la Agenda destacan el aumento de la inversión en investigación y desarrollo (I+D) y la aplicación de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) a los retos que afronta actualmente la sociedad, como el cambio climático o el envejecimiento de la población. La Agenda Digital es una de las siete iniciativas emblemáticas al amparo de la Estrategia Europa 2020, puesta en marcha en marzo de 2010. «El objetivo de esta Agenda es trazar un plan para maximizar el potencial socioeconómico de las TIC, en especial de Internet, un medio vital de actividad económica y social para hacer negocios, trabajar, jugar, comunicarse y expresarse libremente. La aplicación eficaz de esta Agenda dará un impulso a la innovación», se lee en la Comunicación de la Comisión. «Debemos situar los intereses de los ciudadanos y las empresas europeos entre las prioridades de la revolución digital y, de esta manera, maximizar el potencial de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) para incrementar la creación de empleo, la sostenibilidad y la inclusión social», afirmó Neelie Kroes, Vicepresidenta de la Comisión responsable de la Agenda Digital. «La ambiciosa estrategia presentada hoy señala claramente hacia dónde tenemos que dirigir nuestros esfuerzos en los próximos años. Para materializar plenamente el potencial del futuro digital de Europa, debemos contar con el compromiso incondicional de los Estados miembros, el sector de las TIC y otros agentes económicos de importancia vital.» Dentro del Séptimo Programa Marco (7PM) se ha asignado un presupuesto total de 9.100 millones de euros para financiar investigaciones en el campo de las TIC. Se trata, por tanto, del tema de investigación más importante del programa de Cooperación, que es a su vez el mayor programa específico, al contar con el 64% del presupuesto total. No obstante, la cuantía de la inversión de la UE en I+D sigue siendo inferior a la de Estados Unidos. Por ejemplo, en 2007 la UE invirtió 37.000 millones de euros, por los 88.000 millones de euros de Estados Unidos. Por esta razón en la Agenda se enfatiza que «Europa debe invertir más en I+D y asegurarse de que nuestras mejores ideas lleguen a comercializarse». En la Agenda se destacan tres deficiencias culpables de esta diferencia en cuanto a la inversión: un esfuerzo público en I+D débil y disperso; dispersión y fragmentación del mercado; y una lenta asimilación de las innovaciones basadas en TIC. Para remediar estas cuestiones, «Europa debe incrementar, concentrar y reunir sus inversiones para mantener su ventaja competitiva en este campo y seguir invirtiendo en investigación de alto riesgo, incluida la investigación fundamental multidisciplinaria». Concretamente, estas son las actuaciones clave en las que la Comisión propone concentrarse: - potenciar las inversiones privadas; - reforzar la coordinación y puesta en común de recursos entre los Estados miembros y el sector empresarial; - proponer medidas para permitir un acceso «ágil y rápido» a los fondos de la UE para investigación en TIC; - asegurar una ayuda financiera suficiente para las agrupaciones de innovación y las infraestructuras comunes de investigación sobre las TIC; - desarrollar una nueva generación de aplicaciones y servicios web en cooperación con los interesados. Asimismo, antes de 2020 los Estados miembros deberán duplicar la inversión pública total anual en I+D sobre TIC, pasando de 5.500 millones de euros a 11.000 millones de euros, y también participar en proyectos piloto a gran escala para desarrollar y probar soluciones innovadoras e interoperables en áreas de interés general. Pese a todo, las TIC no son fines en sí mismos. «El uso de la tecnología y la explotación de la información de manera inteligente nos ayudarán a superar los retos a los que se enfrenta la sociedad, como el cambio climático y el envejecimiento de la población», se recalca en la Agenda. Esto hace referencia a las TIC dedicadas al ahorro de energía y recursos, la sanidad sostenible y el apoyo basado en TIC para una vida digna e independiente, promoviendo la diversidad cultural y los contenidos creativos, la administración electrónica y sistemas de transporte inteligentes que favorezcan un transporte eficiente y una mejor movilidad. «La sociedad digital se debe proyectar como una sociedad que ofrecerá mejores condiciones para todos», se lee en la Agenda. «El despliegue de las TIC se está convirtiendo gradualmente en un elemento esencial para alcanzar los objetivos de las políticas.»