Un estudio comunitario podría marcar el inicio de una nueva era para el transporte
¿Son los sistemas cooperativos en el transporte una cosa del futuro? Lo son, en opinión de los investigadores del proyecto CVIS («Sistemas cooperativos vehículos-infraestructuras»). CVIS recibió una financiación próxima a los 22 millones de euros para desarrollar, demostrar y evaluar aplicaciones seleccionadas de referencia de sistemas cooperativos para entornos urbanos e interurbanos, así como para la gestión del transporte público y de mercancías. El gran proyecto CVIS recibió apoyo por medio del área temática «Tecnologías de la Sociedad de la Información» del Sexto Programa Marco (6PM). La creación y la implantación de un lenguaje de comunicaciones universal que permitiera la cooperación y el intercambio de información entre infraestructuras y vehículos redundarían enormemente en beneficio del sector de los transportes y de los ciudadanos. Además de mitigar la congestión del tráfico y la contaminación que provoca, los ciudadanos disfrutarían de una mayor seguridad vial, desplazamientos más rápidos e incluso de una menor necesidad de que sus automóviles pasaran por el taller. Los socios del proyecto CVIS opinan que estos avances ayudarían a paliar la frustración de los conductores y a acabar con la violencia vial, un fenómeno que se ha agravado considerablemente en los últimos veinte años. Según los responsables de CVIS, es posible un futuro mejor de conductores cooperantes que utilicen sistemas de cooperación entre vehículos e infraestructuras. Para lograr este objetivo son determinantes los sistemas de transporte inteligente (STI), que incorporan las tecnologías de la información y la comunicación al sector de los transportes. «En todos los continentes se ha reservado una parte del espectro radioeléctrico para los sistemas cooperativos, concretamente en la banda de frecuencias de 5,9 GHz (gigahertzios) en Estados Unidos y Europa y 5,8 GHz en Japón, por lo que sin duda este segmento de los STI va a crecer», aseguró el coordinador de CVIS, Paul Kompfner, responsable del sector de «Movilidad Cooperativa» de ERTICO-ITS Europa, la red que reúne a los agentes interesados en los STI y servicios conexos de Europa. «Diría que actualmente Europa disfruta de cierta ventaja en el desarrollo y la validación de esta tecnología en una amplia gama de sitios de prueba.» El consorcio de CVIS, que se compone de 62 empresas y centros de investigación de 15 países europeos, también ha desarrollado una plataforma abierta e innovadora de STI que puede funcionar a múltiples niveles, desde los dispositivos portátiles a los sistemas de asistencia en carretera. El objetivo final de los socios era desarrollar una serie de tecnologías fundamentales con las que producir una «Internet de los coches» integrada y de código abierto. Así pues, se desarrolló una infraestructura completa de comunicaciones que puede funcionar desde hardware por medio de protocolos, estándares, programas de conectividad (middleware), interfaces de programación de aplicaciones (API) e integración entre plataformas. Asimismo, los socios del proyecto crearon una plataforma que puede funcionar con las infraestructuras de comunicaciones existentes por satélite, infrarrojos y Wi-Fi (Wireless Fidelity). Según fuentes del proyecto, los investigadores acoplaron una cadena de software escalable, abierta y parcialmente de código abierto a una cadena de hardware escalable. La cadena de software puede gestionar varios elementos del marco de CVIS como las comunicaciones «vehículo a vehículo» (V2V), la recogida de datos mediante vehículo flotante (FVD), la gestión del tráfico, etc. Además, esta cadena puede establecer una serie de API. Desde su inicio en 2008, CVIS ha probado todas estas tecnologías en varios ensayos realizados en siete países. Los socios del proyecto aseguran que la «Internet de los coches» tendrá un impacto enorme en el tráfico vial y, en la práctica, se convertirá en el paradigma de cara al desarrollo de otros STI en los años venideros.