Nace una alianza europea para la investigación en materia energética
Diez destacados institutos europeos de investigación en materia de energía se han unido para crear la European Energy Research Alliance (EERA, Alianza europea para la investigación en materia energética), cuyo objetivo es agilizar el desarrollo de las nuevas tecnologías energéticas necesarias para que Europa afronte el triple reto que suponen el cambio climático, la seguridad energética y la competitividad. Juntos, estos diez institutos disponen de un presupuesto anual de más de 1.300 millones de euros para llevar a cabo actividades de investigación y desarrollo (I+D). A través de la EERA, diseñarán y pondrán en práctica programas paneuropeos conjuntos de investigación y promoverán el uso común de instalaciones científicas nacionales del mayor nivel mundial. El lanzamiento de los primeros programas conjuntos está previsto para 2009. La creación de la EERA es una de las varias acciones recogidas en el Plan Estratégico Europeo de Tecnología Energética (EETE). Este plan, puesto en marcha en noviembre de 2007, está diseñado para ayudar a Europa a cumplir sus ambiciosos objetivos de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 20% antes de 2020 y en alrededor del 80% antes de 2050, en respuesta al cambio climático. El Plan EETE, asimismo, favorecerá la competitividad de Europa garantizando que ésta asuma el liderazgo en el desarrollo de las tecnologías innovadoras que necesita de cara a la economía baja en carbono del futuro. «El desarrollo de tecnologías energéticas punteras requiere la unión de los mejores cerebros y recursos, por encima de fronteras nacionales. La creación de la EERA, que coordinará los programas nacionales y europeos de investigación en materia de energía, constituye un crucial paso adelante», manifestó el Comisario europeo de Ciencia e Investigación, Janez Potocnik. «Esta incursión en la programación conjunta nos permitirá beneficiarnos de un aprovechamiento más eficiente de los recursos nacionales y europeos y competir mejor a escala internacional.» El pasado 27 de octubre, los diez institutos de investigación mencionados y la Asociación Europea de Universidades (EUA), así como los Jefes de los Consejos de Investigación Europeos (EUROHORCS), que también apoyan esta iniciativa, suscribieron una declaración de intenciones en las que exponían su compromiso con la EERA. «La EERA se centrará primordialmente en el desarrollo estratégico y dirigido de las próximas generaciones de tecnologías energéticas aprovechando los resultados de la investigación fundamental y haciendo madurar tecnologías para su integración en la investigación realizada por la industria», indican los firmantes. Además, la EERA impulsará la investigación en ámbitos clave como la energía eólica y solar, los biocombustibles de segunda generación, la captura y almacenamiento de carbono, las redes inteligentes de distribución eléctrica (smart grids) y las pilas de combustible. Aparte de establecer programas conjuntos de investigación conforme a las prioridades del EETE y de compartir infraestructuras de investigación, los socios se comprometen a fortalecer los vínculos con la industria; reforzar la capacidad de Europa de llevar a cabo programas de I+D de gran envergadura, riesgo elevado y grandes beneficios potenciales; y desarrollar actividades de formación, educación y acercamiento a la sociedad. Una vez esta organización en ciernes esté plenamente establecida, se admitirá como miembros a todas aquellas organizaciones de investigación que puedan contribuir al logro de sus objetivos. El EETE contempla también otras actividades, como el lanzamiento de «Iniciativas Industriales Europeas» que impulsarán la investigación e innovación industriales en seis sectores clave; la creación de un sistema de información estratégica sobre actividades de I+D en materia de energía; congresos y cumbres periódicas sobre investigación energética; e incrementar los fondos disponibles para la I+D sobre energía en Europa. «El Plan EETE indica el camino que Europa debe seguir para desarrollar la gama más avanzada de tecnologías energéticas asequibles, limpias, eficientes y bajas en emisiones nocivas», declaró Andris Piebalgs, Comisario de Energía. «Tenemos ante nosotros la oportunidad de ser los líderes mundiales en las tecnologías bajas en emisiones de carbono.»