Los eurodiputados votan sobre el Plan Estratégico Europeo de Tecnología Energética
Los eurodiputados han adoptado un nuevo informe que propone recomendaciones sobre cómo puede la UE fortalecer el Plan Estratégico Europeo de Tecnología Energética y contribuir a cumplir sus objetivos relacionados con el cambio climático. Para el eurodiputado Jerzy Buzek, relator y miembro de la Comisión de Industria, Investigación y Energía y de la Comisión Temporal sobre Cambio Climático del Parlamento Europeo, el informe aporta una solución realista y sostenible al reto del cambio climático. Opina que no sólo reconoce la necesidad de reducir las emisiones de carbono, sino también la de mantener la competitividad de la UE en los mercados internacionales. El Parlamento Europeo aprobó el informe en una votación por 596 votos a favor, 85 en contra y 14 abstenciones. «Es necesario que la UE alcance sus objetivos de energías renovables y de reducción de emisiones de CO2 sin disminuir su competitividad económica en los mercados internacionales», añadió el Sr. Buzek. «Por lo tanto, mi propuesta es la de crear incentivos para las tecnologías energéticas de bajo coste y bajas emisiones y apoyarlas mediante los presupuestos de la UE.» La UE se ha marcado los objetivos de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 20% para el año 2020, y de reducirlas entre un 60% y un 80% para el año 2050. Con este informe se pretende lograr tan ambicioso objetivo al exponer un plan que explica cómo debería organizarse la agenda energética europea. Ésta promueve la investigación de tecnologías energéticas nuevas y limpias, que el Parlamento considera fundamentales para ganar la batalla al cambio climático. Estas tecnologías, además de ayudar a Europa a cumplir sus objetivos de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, energías renovables y eficiencia energética, poseen el beneficio añadido de asegurar el futuro abastecimiento energético europeo. «La seguridad energética tiene una enorme importancia para Europa, como también la tiene la energía ecológica y barata», añadió el Sr. Buzek. «Los retos actuales de prevención del agravamiento del calentamiento global y el coste de las emisiones de CO2 significan un coste económico adicional para nuestra economía. Por lo tanto, las emisiones deben reducirse para reducir también los costes. La clave para lograrlo es el desarrollo de tecnologías bajas en emisiones.» En el documento destaca especialmente el compromiso de promoción de la eficiencia energética. De acuerdo con el informe, esto ofrece el mayor potencial para reducir las emisiones de CO2. En concreto, se describe como «el área con más potencial para conseguir una reducción rentable de las emisiones a medio plazo». En el informe también se alude a los biocombustibles, sometidos ahora a un intenso escrutinio, indicando la necesidad de aumentar la investigación dedicada a ellos. Dicha investigación determinaría de una vez por todas el impacto ambiental de producir dichos combustibles. Otro ejemplo del compromiso que la UE ha adquirido con las nuevas tecnologías es la recomendación dirigida a apoyar la creación de hasta doce proyectos de demostración propuestos para la retención y el almacenamiento de carbono. El informe también indica que el apoyo a las tecnologías limpias del carbón, como puede ser la conversión de carbón a gas, «facilitará y abaratará su implantación y posibilitará su imposición obligatoria en un futuro». En cualquier caso, el Parlamento ha dejado claro que el Plan Estratégico Europeo de Tecnología Energética no debería financiarse mediante el traspaso de fondos dedicados a la energía del Séptimo Programa Marco (7PM) ni del Programa Marco para la Competitividad y la Innovación (CIP). Ha indicado a la Comisión que, en lugar de esto, debe destinar financiación alternativa para el apoyo a las actividades de investigación y desarrollo, demostración y comercialización de nuevas tecnologías de bajo carbono o sin carbono.