Skip to main content
European Commission logo
español español
CORDIS - Resultados de investigaciones de la UE
CORDIS
CORDIS Web 30th anniversary CORDIS Web 30th anniversary

Article Category

Contenido archivado el 2023-03-02

Article available in the following languages:

El mundo de las hormigas, plagado de engaños y corrupción

Las hormigas, insectos eusociales de la familia Formicidae, son bien conocidas por la extremada organización de sus colonias y hormigueros. Sin embargo, un estudio reciente realizado por investigadores de la Universidad de Leeds y de la Universidad de Copenhage muestra que, a ...

Las hormigas, insectos eusociales de la familia Formicidae, son bien conocidas por la extremada organización de sus colonias y hormigueros. Sin embargo, un estudio reciente realizado por investigadores de la Universidad de Leeds y de la Universidad de Copenhage muestra que, a pesar de sus dotes de organización, las hormigas son muy capaces de hacer trampas y ser corruptas, independientemente de si se trata de hormigas obreras, zánganos o reinas. Los descubrimientos del estudio, financiado por la Fundación Carlsberg, se publicaron recientemente en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS). El Dr. Bill Hughes de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad de Leeds descubrió que las hormigas nunca están tan dispuestas a cooperar en beneficio de la colonia como cuando tienen algo que ganar. Por su parte, el profesor Jacobus Boomsma del Centro de Evolución Social de la Universidad de Copenhague halló que algunas hormigas tienen la capacidad de saltarse las reglas del sistema asegurándose de que sus crías se conviertan en reinas reproductoras, y no en obreras estériles. «La teoría establecida manifestaba que las reinas se producían únicamente por la alimentación», comentó el Dr. Hughes. «Ciertas larvas eran alimentadas con determinados alimentos que favorecían su transformación en reinas, y todas las larvas podrían tener esa oportunidad», prosiguió. «Sin embargo, llevamos a cabo una identificación por ADN en cinco colonias de hormigas cortadoras de hojas y descubrimos que la descendencia de algunos padres tiene más probabilidades de convertirse en reinas que otras.» Según el Dr. Hughes, estas hormigas tienen un gen o genes «de realeza» que las sitúan por encima de las demás, eliminando de ese modo las probabilidades de sus contendientes de convertirse en reinas. A pesar de que los investigadores conocían la existencia de estas líneas genéticas «de realeza», la creencia común era que estas líneas eran poco frecuentes en cada colonia, debido probablemente a que las hormigas saben prosperar sin delatarse. «Si hubiese demasiadas hormigas de una línea genética que se desarrollasen para convertirse en reinas en una misma colonia, las otras hormigas se darían cuenta y reaccionarían contra ellas», explicó el Dr. Hughes. «Así pues, creemos que los machos que tienen estos genes reales han evolucionado para, de alguna manera, propagar su descendencia por varias colonias y evitar así que se les detecte. La rareza de las líneas reales es, en realidad, una estrategia evolutiva de engaño para escapar de la represión por parte de las masas altruistas a las que explotan.» Varias veces al año las colonias de hormigas producen machos y nuevas reinas que abandonan sus hormigueros para ir a otras colonias donde aparearse. Mientras que los machos mueren poco después de aparearse, las hembras siguen creciendo y establecen nuevas colonias. Ahora los investigadores están intentando determinar si su hipótesis es correcta y si la estrategia de apareamiento de los machos con genes reales garantiza su naturaleza excepcional para ocultar sus privilegios a la «plebe». «Cuando se estudian insectos sociales como las hormigas y las abejas, lo primero que destaca a menudo es el aspecto cooperativo de su sociedad», destacó el Dr. Hughes. «Sin embargo, si te fijas con más profundidad, se puede ver que existen conflictos y trampas y, evidentemente la sociedad humana es un excelente ejemplo de esto.» Antes los investigadores creían que las hormigas eran «una excepción, pero nuestro análisis genético ha mostrado que en su sociedad también abunda la corrupción, y además corrupción en la realeza», puntualizó.

Países

Dinamarca, Reino Unido

Artículos conexos