Venus Express se pone a trabajar
La sonda Venus Express de la Agencia Espacial Europea (AEE) ha alcanzado la órbita operacional en torno al objetivo de su misión desde la que se pondrá a trabajar en breve. La sonda llegó a Venus el 11 de abril y desde entonces ha completado varias vueltas alrededor del planeta corrigiendo poco a poco su trayectoria para situarse en su órbita definitiva, a la que llegó el 7 de mayo. Cuando la sonda realizó su órbita inicial el 11 de abril describió una elipse alrededor del planeta que la alejaba de Venus 330.000 kilómetros (apocentro) y la acercaba hasta menos de 400 kilómetros de la superficie (pericentro). La sonda utilizó los impulsores y el motor principal para reducir la altura del pericentro y el apocentro durante 16 vueltas consecutivas. "El encendido de los motores en el apocentro (el punto más lejano del planeta) permite a la nave controlar su altura en el siguiente pericentro (punto de máxima cercanía), mientras que el encendido en el pericentro controla la altitud en el siguiente apocentro", explicó Andrea Accomazzo, director del Centro de Operaciones Espaciales de ESOC, el Centro Europeo de Operaciones Espaciales. "Mediante esta serie de operaciones la nave se situó en su órbita definitiva el pasado sábado, un giro después de la última maniobra de modificación del pericentro realizada el sábado 6 de mayo". La sonda orbita ahora cada 24 horas a una distancia de 250 km. en el pericentro y de 66.000 km. en el apocentro, alrededor de los polos de Venus. La nave comenzará a examinar el planeta desde esta altura. "Esta es la órbita desde la que se pueden realizar las mejores observaciones posibles de Venus, dados los objetivos científicos de la misión. Entre estos objetivos, figuran el estudio de la atmósfera de Venus, las características de la superficie y la interacción del entorno planetario con los vientos solares", explicó Håkan Svedhem, director científico del proyecto Venus Express. "Permite observaciones detalladas de alta resolución cerca del pericentro y del Polo Norte y el estudio de las regiones menos exploradas alrededor del Polo Sur durante periodos largos a media escala", expresó. Sin embargo, las actividades no comenzarán de inmediato. "En estos momentos se están activando uno por uno todos los instrumentos de la nave para realizarles un control detallado y esta operación no finalizará hasta mediados de mayo. Después los pondremos en funcionamiento todos a la vez o en grupos", aclaró Don McCoy, director del proyecto Venus Express. "Esto nos permitirá realizar ensayos de las observaciones simultáneas de los fenómenos y estar listos el 4 de junio para el lanzamiento de la fase científica nominal de Venus Express", indicó. La misión suscita grandes esperanzas. Las imágenes de prueba captadas por VMC (Venus Monitoring Camera) y VIRTIS (Visible and Infrared Thermal Imaging Spectrometer) ya han proporcionado a la AEE las primeras imágenes tomadas hasta ahora del polo sur del planeta en las que se puede observar un gigantesco vórtice cubierto de nubes. Otros experimentos han revelado más detalles sobre este planeta que en muchos aspectos es gemelo de la Tierra por sus coincidencias en tamaño, edad y distancia al Sol pero que ha evolucionado de una forma muy diferente a nuestro planeta. Muchos expertos consideran que Venus podría haber tenido alguna vez océanos pero, si eso es así, debieron haberse evaporado hace mucho tiempo. El planeta se encuentra ahora envuelto en una espesa capa nubosa tóxica que rota más deprisa que el planeta. Otro de los misterios que esta misión quiere resolver. Los científicos esperan asimismo tomar a Venus como modelo del cambio climático que está experimentando la Tierra.