Reeducar el sistema inmunitario para combatir la diabetes
Actualmente viven en Europa más de medio millón de afectados por la diabetes de tipo 1, enfermedad para la que no hay cura ni ningún medio para prevenirla. La destrucción de las células beta productoras de insulina es un proceso gradual, y la mayoría de los pacientes, en el momento del diagnóstico, siguen presentando una producción residual de insulina. El ensayo DCCT (Evidence from the Diabetes Control and Complications Trial) indicó que los individuos que tienen insulina residual poseen mejor control glucémico, una tasa inferior de hipoglucemia y un menor riesgo de complicaciones a largo plazo. La mayoría de los tratamientos están diseñados para sustituir de forma eficaz el nivel de insulina de los pacientes, sea bajo o nulo. Sin embargo, la baja tasa de eficacia de esta estrategia lleva a pensar que conservar la producción endógena de insulina, por reducida que sea, podría constituir una alternativa con la que mejorar el control glucémico. Esta opción no sólo reducirá la hipoglucemia; también las complicaciones a largo plazo, como la pérdida de visión, la insuficiencia renal y las úlceras en los pies. Los científicos participantes en el proyecto EE-ASI, financiado con fondos europeos, propusieron la técnica EE-ASI (enhanced epidermal antigen specific immunotherapy) para reeducar el sistema inmunitario de forma que deje de destruir las células beta pancreáticas. Este sistema innovador administra péptidos presentes únicamente en las células beta en nanopartículas de oro. Según declaró el coordinador del proyecto, el profesor Dayan: «Las nanopartículas son absorbidas por las células dendríticas, lo que lleva a la presentación del péptido en un contexto no inflamatorio, y ello promueve la generación de linfocitos T reguladores». Se incluye un segundo elemento tolerogénico, la interleucina 10, además de antígeno, para promover la producción de dichos linfocitos. Distribución de nanopartículas Aunque la técnica EE-ASI se asemeja a una vacunación, su finalidad es desactivar las respuestas autoinmunes activando los linfocitos T reguladores. Se sabe que estos reconocen las autoproteínas y cumplen una función protectora consistente en suprimir todo intento del organismo por articular respuestas inmunes a las autoproteínas. Los socios del proyecto cargaron el péptido proinsulina C19-A3 en nanopartículas de oro con una eficacia muy elevada. «El oro es muy inerte y posee propiedades antiinflamatorias que parecen ser beneficiosas», añade el profesor Al administrarlas ex vivo en piel humana mediante microagujas, estas nanopartículas cargadas de péptidos se difundieron en la epidermis y fueron absorbidas por las células de Langerhans. Para eso, debían tener un diámetro de cinco nanómetros, ya que las partículas de mayor tamaño no siguen ese patrón de difusión. Los experimentos preclínicos en roedores mostraron que la difusión a nódulos linfáticos lejanos fue más rápida que con el péptido solo. Mediante estudios toxicológicos se validó la seguridad de la técnica, a raíz de lo cual se solicitó la patente y se puso en marcha un estudio clínico de fase I en menos de cuatro años desde que diera comienzo el proyecto. Eficacia clínica El estudio clínico EE-ASI es el primero con humanos que analiza los efectos de administrar un péptido proinsulina conjugado en nanopartículas. Los resultados indican que, tras administrarlo por vía intradérmica, el oro permanece en la piel durante más de seis meses junto con un infiltrado linfocítico local que merece una investigación más a fondo. En futuros estudios también se podrá determinar si el péptido se mantiene asociado al oro. Además, el consorcio sigue «estudiando otras moléculas tolerogénicas y la incorporación de moléculas de ADN para expresar autopéptidos en la piel», informó el profesor Si bien todavía tienen que realizarse estudios de eficacia, promover que el organismo reconozca la insulina y deje de destruirla como respuesta autoimmune parece ser una opción válida para tratar la diabetes de tipo 1. Al ser fácil de aplicar, es previsible que la técnica EE-ASI permita un mayor cumplimiento por parte de los pacientes y menos complicaciones que la terapia de reemplazo hormonal. A su vez, ello deparará mejores resultados clínicos y una mejor calidad de vida para los pacientes de diabetes y sus familiares.
Palabras clave
Sistema inmunitario, inmunoterapia, diabetes de tipo 1, insulina, células beta pancreáticas, EE-ASI, nanopartícula, linfocitos T reguladores, interleucina 10, proinsulina