Envases sin gérmenes para alimentos perecederos
Consumir frutas y verduras supone muchos beneficios para la salud, pero su tiempo de conservación es más corto que el de los alimentos procesados. Muchas veces conservar limpios los productos evita su deterioro, pero en los alimentos lavados con cloro quedan residuos tóxicos. El proyecto SAFE-BAG (Novel continuous in-pack decontamination system for fresh produce) desarrolló una tecnología de plasma frío atmosférico para resolver estas dificultades. Esta tecnología consiste en enviar corriente de alto voltaje a través del envase del alimento para ionizar el gas que contiene. El gas ionizado (o plasma) es antimicrobiano pero no altera las propiedades nutricionales de los alimentos. Los científicos encontraron que el tiempo de conservación postratamiento, el nivel de voltaje y el tipo de exposición (directa o indirecta) cambian la eficacia del tratamiento. Observaron que al aumentar la concentración de oxígeno se produce más ozono, el gas reactivo responsable de neutralizar las bacterias. Los científicos encontraron que la concentración de óxido de nitrógeno (un segundo gas reactivo) también se asocia a un tratamiento eficaz. Demostraron que en todos los casos la concentración de patógenos disminuye al prolongar el tiempo de tratamiento. Los científicos estudiaron el tratamiento en bolsas de fresas, tomates «cereza» y espinaca, que contenían bacterias Escherichia coli y salmonela. Observaron que las fresas y los tomates «cereza» no se deterioraron, mientras que la espinaca sí se marchitó en todos los tratamientos. Estos avances podrían conducir a productos perecederos sin cloro con un tiempo de conservación más prolongado. Gracias a esta investigación también se evitan los procedimientos de lavado tradicionales que consumen mucha agua.
Palabras clave
Patógenos, productos perecederos, plasma, bacterias, frutas, verduras, tiempo de conservación, descontaminación