Nuevas directrices y herramientas para reducir los residuos alimentarios
El proyecto FUSIONS, cuyo periplo concluirá en julio de 2016, se puso en marcha con el propósito de reducir de manera significativa la generación de residuos alimentarios en toda la cadena de distribución de alimentos en Europa. Estos residuos han sido identificados como una de las principales cuestiones políticas a abordar, en especial debido a los ambiciosos objetivos medioambientales de la Unión Europea y a su determinación por propiciar una economía realmente circular. El equipo del proyecto FUSIONS calcula que el volumen total de residuos alimentarios generado en la Europa de los veintiocho asciende a unos 88 millones de toneladas al año, esto es, el equivalente al 20 % de los alimentos producidos en la UE. Esto representa un coste de 143 millones de euros y 304 millones de toneladas de CO2 en emisiones, un 6 % de los gases de efecto invernadero que se emiten anualmente en la Europa de los veintiocho. Estudios piloto sobre medidas políticas e innovación social Una de las primeras tareas que se fijó el proyecto consistió en efectuar un análisis político exhaustivo de la legislación y las medidas europeas que repercuten en la generación de este tipo de residuos. El equipo identificó cincuenta y tres leyes, reglamentos o resoluciones de diversos ámbitos, incluyendo agricultura, pesca, empresa e industria, fiscalidad, comercio, salud y consumo, así como medio ambiente. Además, los socios del proyecto siguen trabajando para completar un análisis pormenorizado de características similares centrado en las legislaciones correspondientes a cada país de la Europa de los veintiocho —que abarca tanto los Estados miembros que participan en el consorcio como los que no—. Partiendo de este conocimiento profundo de las políticas y las normativas europeas y nacionales, el proyecto ha elaborado un conjunto de recomendaciones en torno a qué instrumentos de mercado podrían resultar más adecuados para propiciar iniciativas centradas en los residuos alimentarios e innovaciones de tipo social. Los socios diferenciaron dos tipos distintos: las que hacen hincapié en las subvenciones y los créditos fiscales, por un lado, y las que ponen sus miras en herramientas de información destinadas a reducir y prevenir los residuos alimentarios, por otro. En esta segunda categoría se incluyen campañas de concienciación pública, acuerdos voluntarios y normas sobre comercialización. FUSIONS ha puesto en funcionamiento siete proyectos de innovación social pioneros en seis Estados miembros con el potencial para estimular que surjan iniciativas de índole similar en el resto de la UE. Los miembros de FUSIONS colaboraron con organizaciones locales para respaldar dichos proyectos. Uno de ellos se centró en el ámbito escolar y ofreció un conjunto de directrices destinadas a profesores y familias sobre cómo reducir los residuos alimentarios y para ofrecer una mayor información a padres y alumnos sobre la importancia de la prevención en esta cuestión. Otro proyecto recopiló recomendaciones detalladas para promover los «supermercados sociales», esto es, organizaciones que venden alimentos y que destinan al menos una parte de sus excedentes a los más necesitados a un precio reducido. Este tipo de supermercado se percibe como una solución para lograr un acercamiento entre la venta minorista y la donación de alimentos. Manual para cuantificar los residuos alimentarios Otro instrumento de valor capital elaborado por el equipo de FUSIONS es el manual titulado «Food Waste Quantification Manual», dirigido específicamente a las autoridades nacionales competentes de los Estados miembros de la UE. Dicha guía proporciona directrices prácticas para aplicar una metodología normalizada que permita cuantificar los residuos alimentarios que se generan en las diferentes fases de la cadena de distribución de alimentos. Dichas pautas abarcan tres actividades principales: establecer la cantidad de residuos alimentarios que se generan en cada paso (, es decir, cada una de las etapas) de la cadena de distribución; combinar el cómputo de las distintas fases empleando un marco común a escala nacional; y comunicar los resultados de los estudios de cuantificación de residuos alimentarios a nivel nacional de manera que resulten coherentes y se puedan comparar. Los Estados miembros no están obligados a ceñirse a las pautas recogidas en el manual. No obstante, si un Estado declara haber seguido esta metodología para calcular el volumen de residuos generado a escala nacional e informar de los resultados correspondientes, entonces deberá cumplir con unos requisitos fundamentales para garantizar la homogeneidad y la coherencia de los mismos. En el congreso de clausura del proyecto, representantes nacionales de Bélgica —de la Región de Flandes— y Reino Unido expusieron sus experiencias en lo que respecta al uso del manual. En concreto, destacaron la claridad del lenguaje del manual y el equilibrio entre homogeneización y flexibilidad, características que permiten a las autoridades nacionales emplear los datos y estrategias que habían desarrollado con anterioridad en lugar de verse abocados a diseñar metodologías y procesos desde cero. Sin embargo, también se sugirió que, para el futuro, podría estudiarse la posibilidad de integrar e interrelacionar las pautas recogidas en el manual con los métodos de seguimiento de este tipo de residuos que aplica la Oficina Europea de Estadística (Eurostat). Fases siguientes En líneas generales, el equipo de FUSIONS espera que su labor contribuya de forma significativa a situar a la UE a la vanguardia mundial en los empeños por reducir los residuos alimentarios. También es probable que la gran red de cooperación forjada durante la andadura del proyecto permanezca en funcionamiento y beneficie a futuros consorcios y programas. A más corto plazo, el proyecto ha puesto a disposición de la Comisión Europea todos sus hallazgos y herramientas para seguir ahondando en su desarrollo, con el fin de favorecer el plan de la Comisión denominado «Hoja de ruta hacia una Europa eficiente en el uso de los recursos» y su objetivo de lograr una reducción de los residuos alimentarios del 50 % para el año 2020. El proyecto FUSIONS celebró su congreso de clausura el 19 de mayo en Bruselas y en total ha recibido casi 4 millones de euros en fondos europeos. Para más información, consulte: Sitio web del proyecto
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