Cables resistentes al fuego para circuitos de emergencia
Tan sólo en la Unión Europea, los incendios causan miles de muertos y cientos de miles de lesiones cada año cuyo coste económico se cifra en cerca de cien mil millones de euros. Aunque las alarmas contra incendios y la iluminación de emergencia son muy eficaces a la hora de reducir los daños, su eficacia depende de la existencia de cables resistentes al fuego capaces de transmitir datos y energía que actualmente están sujetos a fallos en las juntas de las capas de blindaje metálico. En este contexto, los socios del proyecto FIRE SHIELD se propusieron introducir mejoras en los cables resistentes al fuego, y, más concretamente, diseñar cables para redes de datos que sean ignífugos, algo que no existe en la actualidad. Los cables resistentes al fuego actuales, con envoltura blanda, son vulnerables por estar sujetos a fallos en la junta que recorre longitudinalmente el cable, en la que las películas de polímero metalizadas (generalmente a base de cobre) se envuelven alrededor de los componentes del cable elastomérico. Los científicos investigaron un novedoso proceso de pulverización en frío dinámico que se puede aplicar al recubrimiento de cobre conductor directamente sobre el cable a medida que éste se va extruyendo. Los miembros del consorcio determinaron que la tecnología clave consiste en la aceleración de las partículas metálicas durante el proceso de pulverización y diseñaron y fabricaron boquillas pulverizadoras capaces de acelerar partículas en polvo. A continuación estudiaron a fondo los materiales para cables con dureza mejorada que les permitirían mejorar la pulverización dinámica con gas frío del revestimiento del cobre conductor. Utilizando compuestos de caucho de silicona con varios rellenos, los miembros del consorcio obtuvieron propiedades de resistencia al fuego prometedoras, pero las dificultades a la hora de lograr una deposición de cobre uniforme les impidieron obtener revestimientos conductores de la electricidad. Por otra parte, se centraron en compuestos de elastómeros resistentes al fuego prometedores y trataron de desarrollar formulaciones para circuitos de emergencia con durezas de carbonizado superiores capaces de evitar el agrietamiento, tal y como estipulan la norma británica (BS) EN 50200:2006 y las pruebas BS 8434-2:2003. Los científicos demostraron que la silicona compuesta de una combinación de boehmita, carbonato de calcio precipitado y escamas de vidrio ofrecía resultados muy interesantes. En la actualidad siguen trabajando para optimizar las proporciones de cada relleno. Los miembros del consorcio esperan obtener cables resistentes al fuego que se pueden utilizar en los circuitos de transmisión de datos y el alumbrado de emergencia de calidades superiores a los disponibles actualmente en el mercado. Además de ayudar a proteger vidas y bienes en caso de incendios, la tecnología va a mejorar significativamente la posición competitiva de las numerosas pequeñas y medianas empresas (PYME) europeas que trabajan en este sector.