Un cereal tradicional mejora la calidad de vida
El fonio es una importante fuente de nutrientes para millones de personas tras la época de siembra, cuando el grano que constituye su alimento principal aún no ha madurado y escasean otros recursos alimenticios alternativos. Por tanto, el consumo de fonio es esencial para la seguridad alimentaria cuando no se dispone de otros cereales, como ocurre cuando se malogran las cosechas. A pesar de ello, apenas existen estudios científicos sobre este sabroso y nutritivo cereal. El proyecto Fonio («Mejora de la calidad y la competitividad del fonio para mejorar la alimentación en África occidental»), financiado con fondos comunitarios, se puso en marcha con el propósito de aumentar la calidad y competitividad de este cereal a través de mejoras a nivel productivo y tecnológico y del desarrollo de los mercados nacionales y de exportación. En esta iniciativa participaron varios equipos de investigación de carácter interdisciplinario procedentes de tres países europeos y cuatro países de África occidental con experiencia en tecnología alimentaria, nutrición, ingeniería de procesos, ciencias sociales y agronomía. Los socios del proyecto entablaron una estrecha colaboración con los agentes implicados, tales como productores, asociaciones de mujeres y pequeñas empresas. El equipo científico consagró sus esfuerzos a describir la composición bioquímica del fonio, así como sus propiedades tecnológicas, nutritivas y culinarias. La labor de los investigadores giró en torno a la mejora de la calidad del cereal y el desarrollo de nuevos productos con el objetivo de estimular el comercio regional y la exportación del fonio. Por otra parte se abordó la cadena de productos básicos a distintos niveles, haciendo hincapié en las variedades cultivadas, los sistemas agrícolas más adecuados y la mecanización de los procesos posteriores a la cosecha. De este modo el fonio se convirtió en un instrumento de diversificación de la producción y generó más beneficios para los agricultores y las empresas de transformación locales. El proyecto Fonio ha contribuido al bienestar de la población de África occidental gracias a la mejora de la calidad y la competitividad de este cereal.
