El aprovechamiento de los residuos del biodiésel
En la búsqueda por reducir la dependencia de los combustibles fósiles y los efectos asociados al cambio climático y la seguridad energética, la producción de biodiésel para el sector del transporte a partir de aceites vegetales ha ido ganando terreno. Sin embargo, a raíz del aumento de la producción de biodiésel valioso se está acumulando un gran exceso de uno de sus derivados, el glicerol (también conocido como glicerina). Para que la producción de biodiésel pueda ser sostenible, es necesario encontrar nuevos usos comerciales para el glicerol en otros combustibles líquidos avanzados, aplicaciones de bioenergía o productos bioquímicos ecológicos. Además, la incorporación de la producción de dichas sustancias, tanto existentes como novedosas, en un concepto de biorrefinería avanzada mejorará la competitividad de los productores de biodiésel actuales. Los socios del proyecto GLYFINERY se propusieron crear un proceso de producción integrado y sostenible con tales características. La investigación se centró en el desarrollo de nuevos biocatalizadores que favorezcan la obtención de altos rendimientos de los productos deseados a partir de glicerol y aprovechen al máximo la materia prima. Una vez identificados los microorganismos biocatalíticos más prometedores y los mejores procesos de fermentación para la conversión biológica, los investigadores dedicaron el tercer y cuarto años del proyecto a la optimización del diseño de los bioprocesos y al desarrollo y la optimización de los procesos de recuperación. En el tercer año se identificaron cinco productos potenciales: 1,3-propanodiol (PDO), butanol, etanol, biodiésel y biometano. Los miembros del consorcio optimizaron los procesos para los cinco y aumentaron su escala hasta iniciar las primeras pruebas piloto. Para recuperar el biometano, los investigadores introdujeron los productos de fermentación en un biodigestor anaeróbico. Los socios responsables de la producción y de la recuperación colaboraron estrechamente en la evaluación del ciclo de vida (LCA) para desarrollar métodos económica y ambientalmente sostenibles que se pudieran integrar en un concepto de biorrefinería avanzada. Gracias a GLYFINERY se ha logrado demostrar la viabilidad técnica, económica y medioambiental de la conversión de glicerol en productos de valor añadido, lo que fomentará la producción de biodiésel sostenible y la gestión eficaz de los residuos. Al hacer frente al exceso de glicerol derivado del aumento continuo de la producción mundial de biodiésel, la tecnología desarrollada repercutirá muy positivamente en la competitividad de la producción de este último.