El láser óptico deslumbra al mundo de la electrónica
La optoelectrónica hace referencia a dispositivos electrónicos que producen, detectan y controlan la luz y ciertas formas de radiación. Esta tecnología se emplea para desarrollar transistores, circuitos, escáneres, láseres y sistemas de comunicación por fibra óptica, entre otros dispositivos. Seguramente el ejemplo más conocido de este tipo de tecnología son los diodos emisores de luz (LED), utilizados para iluminar desde todo tipo de instrumentos hasta cuadros de mandos de vehículos. La optoelectrónica es una rama de esta tecnología que emplea componentes orgánicos como el carbono. Este tipo de materiales permiten que esta tecnología sea económica, ligera, flexible y ecológica. Por consiguiente, la optoelectrónica orgánica ofrece muchas ventajas frente a otros planteamientos tradicionales o basados en materiales inorgánicos. Un consorcio de investigadores financiados con fondos comunitarios ha puesto en marcha un proyecto para crear lo que se denomina un «láser orgánico bombeado eléctricamente» (OEPL). El equipo responsable del proyecto empleó semiconductores y circuitos orgánicos de última generación para solucionar los principales problemas planteados por este nuevo láser, que tendrá un tremendo impacto en la ciencia, la tecnología y las comunicaciones. Más eficaz que sus predecesores, este láser puede utilizarse en una serie de aplicaciones y es compatible con una variedad más amplia de materiales, como el vidrio, los polímeros y el silicio. A pesar de que Japón y Estados Unidos ya han experimentado con esta tecnología, el equipo ha logrado importantes progresos. Se han solicitado tres patentes que abren el camino a la posible explotación comercial de los resultados en el futuro, y existe unanimidad en cuanto al éxito del proyecto. Varias ramas de la ciencia, como la física o la electrónica, podrán beneficiarse de esta tecnología en la que la UE se está perfilando como potencia mundial.